...es Antioquia la que pasa!".
Hace siete años que no asisto al Desfile de Silleteros. Este evento, quizás el más destacado de las fiestas populares de Medellìn, cumplió este agosto 50 años. Y como los paisas no conocemos de medias tintas, lo organizaron maravillosamente, según me cuentan los amigos, los diarios, algunos blogs y hasta las noticieros de televisión en España. Me hubiese gustado mucho ser uno más de ese millón de personas que se volcaron a las calles para aplaudir a los 500 silleteros que orgullosos llevan a cuestas muchos kilos de flores, varias noches de trabajo y el saberse constructores y parte importante de una sociedad "aporriada" pero luchadora.
Desde Zaragoza, a miles de kilómetros de distancia, volví a sentir la "nostalgia campesina" de ver pasar a esos habitantes del corregimiento de Santa Elena, a las reinas de belleza, los grupos folclóricos, los personajes populares... y el sentir que el de al lado, el que lleva horas esperando el desfile, es un paisa más, que durante unos días se hace igual al vecino, un desconocido amigo, un "parcero" que siente todo el amor por su patria chica y te regala unas risas, una exageración, un trago de aguardiente...
Y como Medellín tiene sentimientos de tango, siento que hay que decir: "Yo adivino el parpadeo de las luces que a lo lejos van marcando mi retorno". Hay que volver, de pensamiento y palabra y obra... pero no de omisión.
Hola Merlín,
ResponderEliminarNuestra tierra, nuestras constumbres, nuestra raza....eso son los silleteros.
Saludos,