jueves, 28 de febrero de 2008

A veces llegan cartas (4)


A todos nos ha tocado un abrazo amoroso, así sea levemente. Y a cada uno le reserva un sentimiento distinto. Para mí, andar solo, sin una presencia amorosa, sin la ternura compartida, no era más que una costumbre con la que aprendí a convivir. Tantos días así, tantos meses elaborando la indiferencia, la desventura y las calles vacías. Tantos años con el corazón en un limbo gris, sin noches de luna ni soles gloriosamente brillantes. Todo en una búsqueda ansiosa de lo que esperaba sin afán y deseaba cada día.

Pero una mañana, silenciosamente, sin hacer ningún ruido, casi sin una sola palabra, apareciste frente a un espejo, con unos ojos que decían sin decir, que pedían sin rogar, que soñaban en mí, sin dormir. Bastó caminar, juntos, en la dirección que tú tomabas. De los temas trascendentales a la conversación tranquila y el café sin azúcar sólo bastaron una horas. Unas horas de cine, caminar por el centro en una noche de Navidad y luego la confidencia de tu corazón luchando contra mí y a favor tuyo, a favor de los dos. ¿Para qué jugar a favor de la soledad de los dos si es mejor luchar por una partida que podemos ganar los dos? Y jugamos y arriesgamos y ganamos. Estamos juntos, Aquí, Ahora. Al Hoy le apostamos todo. El Ayer, aunque nos amarga a ratos -porque nos dolió, nos tuvo cerca ignorándolo y nos hirió- tratamos cada día de enterrarlo. El Mañana lo construimos desde ese Hoy, un presente que nos alegra, nos apasiona, nos acerca, nos cuestiona, nos hace dudar y nos duele a ratos. pero hemos afrontado la partida. ¡Tanto queremos lograr! ¡Tanto debemos cambiarnos, aceptarnos y tolerarnos! ¡Tanto nos necesitamos!...

"Compañero, Usted sabe que puede contar conmigo... Es tan lindo saber que Usted existe... Yo quisiera contar con Usted, no por por hoy o por mañana sino POR SIEMPRE... porque entre Usted y yo es imposible la distancia, el olvido o la indiferencia". (Mario Benedetti)

San Bernardo del Viento, 6 de enero de 1993.

lunes, 25 de febrero de 2008

Amor, Amor que está herido

Paulo Coelho publicó este domingo en XL Semanal un interesante artículo sobre los heridos de amor:


*Quien tenga la intención de amar debe ser consciente de que está exponiendo su cuerpo y alma a heridas de muy diferentes tipos, sin poder culpar por ello a su pareja en ningún momento, puesto que ambos corren el mismo riesgo.

*Una vez alcanzado por una flecha del arco ciego de Cupido, debe solicitarse inmediatamente al arquero que dispare la misma flecha en dirección opuesta, con el objeto de no sufrir la herida conocida como "amor no correspondido". En caso de que Cupido se niegue a hacerlo (...) el herido, de manera inmediata, debe arrancarse la flecha del corazón y arrojarla a la basura.

*En el caso de que la herida provenga de un tercero, se permite el uso de lágrimas hasta que los ojos se sequen, así como algunos puñetazos en la pared o en la almohada... Pero queda expresamente prohibida la venganza.

*En lesiones leves, como pequeñas traiciones, pasiones fulminantes que no duran mucho o falta de interés sexual pasajero, debe aplicarse con generosidad y rapidez el medicamento del "perdón". El asunto debe ser definitivamente olvidado y no puede utilizarse jamás como argumento en discusiones o momentos de odio.

*En las heridas definitivas, llamadas "rupturas", el único medicamento se llama "Tiempo". Se deben sufrir con intensidad. No sirven las telenovelas, los libros románticos, ni los echadores de cartas. Hay que evitar drogas y calmantes. Se permiten sólo dos vasos de vino al día.

*Los heridos por el amor no son víctimas ni verdugos. Optaron por algo que forma parte de la vida y deben asumir, por consiguiente, la agonía y el éxtasis de su elección. Y los que jamás fueron heridos por el Amor, nunca podrán decir "He vivido". Porque no vivieron.

domingo, 24 de febrero de 2008

La Primavera la sangre altera


Insisto. Faltan, según el calendario, 27 días para que termine el invierno en esta zona del Planeta Azul, pero la naturaleza insiste en adelantarse. Me alegran la vista y el espíritu los almendros en flor, los brotes de los árboles, las tímidas margaritas que bajan hacia el riachuelo y hasta unas silvestres florecillas que resolvieron instalarse en una maceta de mi ventana.

He leído algo sobre la depresión o melancolía otoñal y la depresión estacional, que ocurren cada año por la misma época y la sufren muchas personas debido a la disminución de la luz solar. Quizás por esto, en esta época se siente muy bien salir a la calle y, aunque aun hace frío, saber que la Madre Naturaleza se alía con los depres para regalarnos amarillos intensos, verdes relajantes y la esperanza de unos meses soleados.

"No creas que porque canto
tengo el corazón alegre
yo soy como el pajarito
que si no canta se muere".

sábado, 23 de febrero de 2008

Bésame, bésame mucho...

En estos días está de moda el tema de los besos en algunos de mis blogs favoritos. ¿Coincidencia? Seguro. He tenido varias semanas sobre el escritorio un recorte sobre el tema, una especie de recordatorio para un nuevo post. Así que, aprovecho la feliz simultaneidad con 38 grados y con Dark Angel para aportar algo más a esto de la Filemamanía, nombre científico que recibe el deseo de besar.

Según los expertos, si hay comunión mental y la suficiente atracción física en el beso, el alud de procesos químicos que se suceden provoca una auténtica conmoción en el organismo. A pesar de que alrededor de dos millones de bacterias y 40.000 microorganismos cambian de dueño después de un beso, el efecto es tan abrumador que, según algunos biólogos, podría compararse a una sobredosis de anfetaminas. Durante un beso de alta intensidad aumentan los niveles de dopamina (sustancia asociada con la sensación de bienestar) y de testosterona (hormona asociada al deseo sexual), y las glándulas adrenales segregan adrenalina y noradrenalina, que aumentan la presión arterial y la frecuencia cardiaca.

A la vez, la glándula pituitaria, situada en la base del cerebro, libera oxitocina, mágica hormona que, además de hacernos sentir como flotando, dicen que ha ayudado bastante a la perpetuación de la especie humana. Además, el acto de besarse también estimula la parte del cerebro que libera endorfinas (hormonas de la felicidad) en el torrente sanguíneo creando una sensación de bienestar, siendo antídoto para la depresión, y mejorando las defensas del cuerpo. (Datos obtenidos en cienciapopular.com).

NOTA: Soy Merlín Púrpura y soy Filemamaníaco. Y no quiero curarme. Sobre todo por algunos besos que crean adicción.

jueves, 21 de febrero de 2008

Sin Piel

Interpreta Mónica Navarro
Autora: Eladia Blázquez
Arreglo de Horacio Di Yorio y Eduardo Mauris
Ya se llegó la hora de archivar el corazón
de hacer con la ilusión que no me va a servir
un lindo paquetito con una cinta azul
guardarlo en el baul y no volverlo a abrir.

Es hora de matar los sueños
es hora de inventar coraje
para iniciar un largo viaje
por un gris paisaje
sin amor.

Voy a aprender a llorar sin sufrir
sin detenerme a mirar una flor
a encallecer lentamente
igual que la gente
sin alma y sin voz.

Voy a aprender que se puede
morir y latir al compás del reloj
como una máquina fiel
igual que un robot sin piel.

Después de haber sentido hasta el dolor
a los demás,
de darme sin medir,
de amar sin calcular,
llegó la indiferencia metiéndose en mi piel
pacientemente cruel,
matando mi verdad;
saber que no me importa nada
de alguna vibración pasada
y caminar narcotizado
por un mundo helado
sin amor.

Voy a aprender a llorar sin sufrir
sin detenerme a mirar una flor
a encallecer lentamente
igual que la gente
sin alma y sin voz.

Voy a aprender que se puede
morir y latir al compás del reloj
como una máquina fiel
igual que un robot sin piel

miércoles, 20 de febrero de 2008

De Alzheimer, Siliconas y Viagras



"En el mundo actual se está invirtiendo cinco veces más en medicamentos para la virilidad masculina y silicona para mujeres que en la cura del Alzheimer.

"De seguir así, dentro de unos años tendremos viejas de tetas grandes y viejos con pene duro, pero ninguno de ellos se acordará para que sirven"
Dr. Drauzio Varellaguno

Esta frase me la ha enviado una amiga, via mail. No sé quién es el doctor en mención, ni he podido corroborar la exactitud de los datos, pero que hay mucho de razón no se puede negar. Se nos olvida que la vejez no son solo las arrugas o las canas. El cuerpo no miente. Envejece y lo hace notar. Como decía mi abuela: "Mira esa mujer, sin arrugas gracias a la cirugía, pero camina como una viejita". Pero la mente... si queremos puede mantenerse joven, hábil y ágil. Cuestión de prioridades.

Gracias, Charo, por el aporte de hoy a este blog.

martes, 19 de febrero de 2008

A pesar de todo

¿Una imagen vale más que mil palabras?



A pesar de todo
Me trae cada día
La loca esperanza
La absurda alegría.

A pesar de todo
De todas las cosas
Me brota la vida
Me crecen las rosas.

A pesar de todo
Me llueven luceros
Invento un idioma
Diciendo Te Quiero

Un sueño me acuna
Y yo me acomodo
Mi almohada de luna
A pesar de todo.

A pesar de todo
La vida que es dura
También es milagro
También aventura.

A pesar de todo
Irás adelante
La fe en el camino
Será tu constante.

A pesar de todo
Dejándola abierta
Verás que se cuela
El sol por tu puerta.

No hay mejor motivo
Si encuentras el modo
De sentirte vivo
A pesar de todo.

A pesar de todo
Estoy aquí puesta
Los pájaros sueltos
Y el alma de fiesta.

A pesar de todo
Me besa tu risa
Y el duende y el ángel
Del vino y la brisa.

A pesar de todo
El pan y la casa
Los chicos que crecen
Jugando en la plaza.

A pesar de todo
La vida qué hermosa
Siempre y sobre todo
De todas las cosas

A pesar de todo
Dejándola abierta
verás que se cuela
El sol por tu puerta.

No hay mejor motivo
Si encuentras el modo
De sentirte vivo
A pesar de todo

lunes, 18 de febrero de 2008

Sin Señal de Adiós

Soy paisa. Me gusta el tango. Sobre todos, los que interpreta Susana Rinaldi, desde aquella vez, hace más de 20 años, que la ví y escuché en el teatro Pablo Tobón Uribe de Medellín. Tangos, milongas, candombés. Historias de amor y desamor. Pero siempre historias del alma. Y como me hace sentir y vibrar, aquí una de ellas.


(Interpreta Susana Rinaldi)

Qué dulce modo tenés de no estar
quédate así cuando te vas,
como un aroma de sol en la piel
mucho verano después.


Qué melancólico modo tenés
de acompañar aunque no estés
,
tiembla en el aire del atardecer
verte por última vez.


Tanta vida mía
desvivir no sé
,
a la lejanía me acostumbraré,
pero va por dentro la procesión
sin señal de adiós,
sin señal de adiós.


Qué dulce modo de permanecer,
cómo me das rumbo y ayer,
hago de tanto trabajo interior
lágrimas y resplandor.


Honda manera tenés de callar
cántame así cuando te vas
dejándome misterioso rumor
de manantial interior.


Tanta vida mía
desvivir no sé,
a la lejanía me acostumbraré,
pero va por dentro la procesión
sin señal de adiós.
sin señal de adiós,
sin señal de adiós.

viernes, 15 de febrero de 2008

Frases

"Nada hace reir más a Dios
que un hombre haciendo planes"

"Si sabes
dónde está el suelo,
siempre podrás caer de pie."

George Cukor

(Ilustración Joe Phillips)

Cuídate de los Camiones de Basura

Este es uno de esos mensajes que llegan y colapsan las bandejas de entrada de los correos electrónicos. Muchos los borro de inmediato. Pero este merece pasar a Lo que (se) me ocurre. Así que aquí os lo dejo.

Por David J. Pollay


¿Con qué frecuencia permites que las tonterías de otras personas cambien tu estado de ánimo? ¿Permites que otro conductor te haga enojar cuando vas manejando, o un mesero grosero, un jefe cortante o un empleado insensible arruinen tu día?

A menos que seas el Terminator, por un instante sentirás algo de furia. Sin embargo, lo que distingue a una persona exitosa es lo rápido que puede enfocarse de nuevo en lo que realmente es importante. Hace 16 años que aprendí esta lección. La aprendí en el asiento trasero de un taxi en Nueva York.

Me subí a un taxi y partimos para la estación "Grand Central". Íbamos en el carril derecho, cuando de repente un auto negro salió repentinamente de un estacionamiento justo en frente de nosotros. El chofer frenó con fuerza, dio un patinazo, y por unos pocos centímetros evitó chocar con el otro carro. El conductor del otro auto, el que casi causó un accidente, volteó su cabeza y empezó a gritarnos con muchas palabrotas. El taxista solo sonrió y le saludó amable. Así que yo le pregunté, '¿Por qué hizo eso?' Ese sujeto por poco destruye su auto y nos manda al hospital.
Entonces el taxista me dijo lo que ahora llamo "La Ley del Camión de Basura". Muchas personas son como un camión de basura. Andan llenos de basura; llenos de frustración, enojo, y decepción. Conforme se les va amontonando la basura, necesitan un lugar en donde puedan tirarla. Si tú se lo permites, te la echan a ti.

Cuando alguien quiere echar su basura sobre ti, no lo tomes en forma personal. Solo sonríes, saludas, deséales lo mejor, y sigue adelante. Estarás feliz de que lo hayas hecho.
Así que, esto era la Ley del Camión de Basura. Empecé a pensar, "¿Con qué frecuencia permito que los camiones de basura me atropellen?", "¿Con qué frecuencia acepto la basura que llevan y la riego sobre otras personas... en el trabajo, en la casa, en las calles?"


Fue ese día que dije, "Ya no voy a hacer eso." Empecé a ver muchos camiones de basura. Veía lo que llevaban. Veía cuando llegaban para vaciar la basura. Y como mi taxista, ya no lo tomo en forma personal. Solo sonrío, saludo, les deseo lo mejor y sigo adelante.

Uno de mis jugadores favoritos de fútbol americano de toda la historia, Walter Payton, hacía esto todos los días en el campo de fútbol. Tan pronto como caía al suelo después de ser tacleado, se ponía de pie. Nunca se quedaba pensando en lo que le habían hecho. Payton estaba listo para hacer que la siguiente jugada fuera la mejor.

Los buenos líderes saben que tienen que estar listos para su próxima reunión. Los padres buenos saben que tienen que recibir a sus hijos con abrazos y besos cuando regresan de la escuela. Los maestros y padres saben que tienen que estar totalmente presentes y dando lo mejor para las personas que les son importantes.


La gente exitosa no permite que los camiones de basura tomen el control de su día. ¿Y tú? ¿Qué pasaría en tu vida, a partir de hoy, si dejaras que más camiones de basura pasaran sin que te afectaran? Apuesto que estarías más feliz. Así que, ama a las personas que te tratan bien. Olvídate de las que no lo hacen. Cree que todo sucede por una razón. Si se te presenta una oportunidad, TÓMALA. Si algo cambia tu vida, DEJA QUE TE CAMBIE. Nadie dijo que sería fácil. Solo prometieron que valdría la pena.
"Sé más amable de lo que sea necesario, porque cada persona con la que te encuentras, está peleando alguna batalla".

jueves, 14 de febrero de 2008

San Valentín

Para quienes he amado y amo. Para quienes amaré. Para quienes disfrutan de un feliz olvido. Y para tí, por supuesto.

¡Día de San Valentín! ¡Compra! ¡Compra! ¡Compra! Lo ordenan El Corte Inglés, Almacenes Éxito, la floristería, la tienda de tarjetas, la tele, la radio, las revistas... Compra flores, compra chocolates, compra tarjetas cursis, manda sms cifrados, escribe mails, reenvía powers points o tarjetas virtuales. Apúntate en un chat de ligue. Ve a encuentros de singles, a seis personas por hora. Olvídate de ser original y sorprender a tu pareja o pretendido(a) cada día: hoy el comercio piensa, decide y actúa por tí. Déjate ver por la calle cargado de paquetes. Siempre está la opción de cambiarlos o de que te devuelvan el dinero que has pagado por esos calzoncillos de corazoncitos y esa lencería roja con plumitas, lentejuelas y transparencias...

Sé que sueno envidioso. Pero no siento envidia por el rebaño, por la manada. Yo aun prefiero "Besos, ternura, derroche de amor, cuánta locura". Las locuras de fugarse un fin de semana, de la carta secreta, los besos robados y los concedidos; el tomarse de la mano en el cine, en el auto, en la calle, hoy, ayer, en septiembre o en abril, cualquier día. Prefiero las mariposas en el estómago, la mirada verde, azul, marrón o gris que echa chispas cuando abajo sonríe la boca de su dueño(a). Prefiero no confundir Amor con compañía. Prefiero no llamar Amor a lo que es solo sexo o un acuerdo de solitarios. Prefiero decir a alguien que amo, que le amo, cuando me sale del corazón. Prefiero regalarle un libro que me gusta, unas galletitas para el café, una canción, una carta o un abrazo rompehuesos cuando me ha dado la gana de acordarme y de sentirlo. Prefiero ser cursi, romanticón, mañé, hortera, llámalo como quieras, pero yo amo a mi manera, no a la manera del libro de ingresos y beneficios de los centros comerciales. Por mí, hoy, las rosas bogotanas, mis preferidas entre las rosas, pueden quedarse en los invernaderos. Y las cajas de bombones de chocolate belga (mis preferidos) pueden quedarse en los escaparates. Un día, cualquiera, me apetecerá comprarlos y regalarlos a quien lo merece.

miércoles, 13 de febrero de 2008

Corazón espinado



" ... Corazón toca´o
que no quiere querer
Corazón vola´o
que no se deja querer
Corazón olvida´o
que ya no ha vuelto a querer
Corazón apalea´o
que prometió no querer ..."

(Notica: Mañana dizque es San Valentín)

martes, 12 de febrero de 2008

Las respuestas...

"CUANDO UNA PREGUNTA CARECE DE RESPUESTA CORRECTA,
SÓLO QUEDA LA RESPUESTA SINCERA"Dan Brown
El Código Da Vinci

lunes, 11 de febrero de 2008

Mentiras que pretenden borrar los sentimientos

Me odio cuando miento
(Fangoria)
[L. Prosper/I. Canut/O. Gara]


Vimos pasar el cometa…
Tumbados sobre la arena…
Hablando de cosas que suenan trascendentes…
Haciendo promesas
que tú y yo sabemos que no hay que cumplir…

Vimos hundirse la noche…
En la distancia más corta…
Robando los sueños a la madrugada…
Soñando despiertos con que es más fácil lograr así un final feliz…

Y ahora me arrepiento,
de no haber sabido aprovechar el momento…
Y siento haber oido mi voz diciendo que no importa nada,
que son cosas de la vida,
Que algun día lo olvidaríamos los dos…

Me odio cuando miento.

Nos despedimos despacio,
Para alargar el momento…
Siendo prudentes, por no decir cobardes…
Y apretando los dientes
para no decir "Yo me quiero quedar aquí contigo".

Y ahora me arrepiento,
de no haber sabido aprovechar el momento…
Y siento haber oído mi voz diciendo que no importa nada,
que son cosas de la vida,
Que algun día lo olvidaríamos los dos…

Me odio cuando miento.
Me odio cuando miento.
Me odio cuando miento.
También cuando me mienten.
Mentiras que pretenden borrar los sentimientos...
Me odio cuando miento.

domingo, 10 de febrero de 2008

El Reloj Biológico

10 de febrero. Invierno. Es de suponer que faltan unas seis semanas para que comience la Primavera, la época en que comienzan a reverdecer y a florecer las plantas. Siempre me ha sorprendido esa temporada. Es como si de repente los almendros de pusieran de acuerdo y, lo que ayer era un árbol sin hojas, hoy amanece repleto de flores blancas, rosas, rojas... Pero eso a mediados de marzo.


Hoy, una mañana de invierno, a 8ºC, me encuentro con un árbol luciendo un traje blanco en medio de una urbanización. Y otros tantos, los de la Avenida que está cerca a casa, que siempre me han anunciado la llegada de la florescencia, están que revientan de ganas de sacar sus galas al sol.


¿Cambio climático?¿Reloj biológico? ¿O una demostración más de que la Madre Naturaleza no entiende de fechas y hace lo que le da la gana para llamar la atención de los humanos?

sábado, 9 de febrero de 2008

Subrayados 12. Memoria de mis putas tristes.

"El sexo es el consuelo que uno tiene cuando no le alcanza el amor".

*** ***
"Es imposible no terminar siendo como los otros creen que uno es". (Atribuido a Julio César)

*** ***
"-Es que me estoy volviendo viejo, le dije.
-Ya lo estamos, suspiró ella.
-Lo que pasa es que uno no lo siente por dentro, pero desde fuera todo el mundo lo ve" .

Gabriel García Márquez.
Memoria de mis putas tristes.

Tormenta de Verano

"Si te escondes
toda la vida,
ni siquiera tú
te reconoces."

Tormenta de Verano
(Sommersturm)
Dir.: Marco Zreuzpainter
Premio del Público
Festival Internacional de Cine de Munich, 2004

viernes, 8 de febrero de 2008

El Lado Oscuro del Corazón 2

Alejandra: ¿Vas a seguir amándome el día en que ya no me quieras?

Oliverio: ¡Voy a seguir amándote aún el día en que ya no te quiera!



*** *** ***

Alejandra: Recibe este amor que te pido. Recibe lo que hay en mí que eres tú.

Oliverio: Sin tí, me tomo en mis brazos y me llevo a la vida a mendigar fervor.

*** *** ***
Estar contigo
o no estar contigo
es la medida de mi tiempo


*** *** ***

Nacida en todos los sitios donde pongo los ojos
Con la cabeza levantada
Y todo el cabello al viento
Eres más hermosa que el relincho de un potro en la montaña
Que la sirena de un barco que deja escapar toda su alma
Que un faro en la neblina buscando a quien salvar
Eres más hermosa que la golondrina atravesada por el viento
Eres el ruido del mar en verano
Eres el ruido de una calle populosa llena de admiración
Mi gloria está en tus ojos
Vestida del lujo de tus ojos y de su brillo interno
Estoy sentado en el rincón más sensible de tu mirada
Bajo el silencio estático de inmóviles pestañas
Viene saliendo un augurio del fondo de tus ojos
Y un viento de océano ondula tus pupilas
Nada se compara a esa leyenda de semillas que deja tu presencia
A esa voz que busca un astro muerto que volver a la vida
Tu voz hace un imperio en el espacio
Y esa mano que se levanta en ti como si fuera acolgar soles en el aire
Y ese mirar que escribe mundos en el infinito
Y esa cabeza que se dobla para escuchar un murmullo en la eternidad
Y ese pie que es la fiesta de los caminos encadenados
Y esos párpados donde vienen a vararse las centellas del éter
Y ese beso que hincha la proa de tus labios
Y esa sonrisa como un estandarte al frente de tu vida
Y ese secreto que dirige las mareas de tu pecho dormido a la sombra de tus senos
Si tú murieras
Las estrellas a pesar de su lámpara encendida
Perderían el camino
¿Qué sería del universo?

"El viaje en Paracaidas" 1931, de Vicente Huidobro (1893-1948). II Canto



Todo lo que se pueda decir es mentira;
el resto es silencio.
Sólo que el silencio no existe.
Las palabras no hacen el amor,
hacen la ausencia.
Si digo agua, ¿beberé?
Si digo pan, ¿comeré?
Lo que pasa con el alma es que no se ve.
Lo que pasa con el espíritu es que no se ve.
¿De dónde viene esa conspiración de invisibilidad?
Ninguna palabra es visible.


Dirección y guión: Eliseo Subiela.
País: Argentina, España.
Año: 2001.
Interpretación: Darío Grandinetti (Oliverio), Ariadna Gil (Alejandra), Nacha Guevara (La Muerte), Sandra Ballesteros (Ana), Manuel Bandera, Santiago Ramos, Pepe Novoa, Carolina Pelleritti.
Producción: Enrique Cerezo, Gerardo Herrero y Luis Alberto Scalella.
Música: Osvaldo Montes.
Fotografía: Teo Delgado.

jueves, 7 de febrero de 2008

"Luis Buñuel, un cineasta que va con el siglo"

Así titulamos la tesis de grado. Una serie de programas de radio que escribimos mi compañera y yo, en 1982, para obtener el título de "Comunicador Social-Periodista". Fueron muchísimas horas viendo el cine de este "español universal", aragonés, surrealista, irreverente, ateo "gracias a Dios" y profundamente religioso. Aprendimos de él, de Dalí, de García Lorca, de la Residencia de Estudiantes, de actrices como Silvia Pinal o Catherine Deneuve, de censura, de festivales de cine, de la música de Wagner, de fetichismos... La verdad es que aprendimos a querer y a admirar a Buñuel y a su obra.

¿Quién habría de pensar que, años después, el destino me traería a vivir a España? Aquí pude presenciar en su natal Calanda, la "Rompida de la Hora", aquella ancestral costumbre de tocar cientos de tambores al mediodía del Viernes Santo, y a la que el director asistía anualmente. Para mí una de las más emocionantes manifestaciones culturales de España.



El Festival de Cine de Berlín rinde este año un homenaje a Buñuel, con retrospectiva de su obra, que arrancará con "Un Perro Andaluz" (1929) para repasar cerca de 40 películas que dirigió, más algunos títulos en los que fue ayudante de dirección, guionista o productor. Se incluirán películas de sus etapas española, francesa y mexicana, y el estreno de "El Último Guión", un documental en el que participa el hijo del director, Juan Luis, y su colaborador y guionista Jean Claude Carriére.

Este cineasta que iba con el siglo XX porque nació en 1900, parece que perdura con ahínco en el XXI. ¿Qué pensaría hoy este hombre que quería levantarse de la tumba cada diez años a comprar los periódicos para ver cómo va el mundo? Al menos que su obra no se olvida. Y "por sus obras los conoceréis".

A veces llegan cartas (3)

Hace un año yo estaba ilusionado. Ilusionado con una persona que era el Amor. Un Amor que era mágico. Un Amor que llegó con una sola mirada. Un Amor que era humano que se sentía divino. Un Amor que se marchitó de a poquitos y yo dejaba que se marchitara porque me cansé de la lucha por los momentos, por los abrazos, por las caricias (especialmente las del alma). Era un ser humano, demasiado humano, que me pedía a gritos un minuto de cariño y yo le daba horas que no eran entendidas. Un ser que me amaba a su manera, pero no era la manera que yo quería y soñaba desde que estrené el Alma. Ese Amor era tan joven, tan tierno, tan inexperto (¿quién tiene experiencia en estas lides?) y a la vez tan sufrido, con tanto dolor en su corazón, que no podía más que exigir atención al ciento por ciento.

Fue tan vital para mí que su dolor era el mío. Que podía hacerme sufrir con su sufrimiento, que me bastaba una mirada suya a treinta metros de distancia para comprender que estaba a punto de huir del mundo y de la Vida. Mi tarea, que no fue asignada por nadie o quizás por la Vida misma, era procurar que continuara viviendo, aunque fuese con dolor, para que comprendiera que esos son requisitos indispensables para crecer y madurar.

Muchas veces me cansé de reproches, reclamos, rechazos y malos entendidos, de explicaciones no pedidas y culpabilidades injustas. Muchas veces huí. Muchas noches lloré amargamente por lo que no me daban o no entendía por qué me lo negaban. Y de repente opté por el silencio. Por ese ostracismo que duele en el alma -más en la de quien la da que en la de quien recibe-. Pero se limitó sólo al silencio. Porque sus ojos estaban allí, al alcance, hablando, sintiéndose observados, queridos, deseados. Su figura se me atravesaba cada mañana. Sus palabras llegaban a mis oídos como dulces saetas. Sus deseos para un buen día, que llegaron en su mano una mañana de febrero no recibieron respuesta aunque en el corazón quisiera contestar con un inolvidable beso en el fondo de su Alma.

(...) Me bastaron uns días para reconocer que lo amo tanto que, aún sabiendo que podría hacerme daño, respondí a su llamado. Me saltó el corazón cuando su voz estaba al teléfono. Acepté sus halagos. Acepté sus palabras. Acepté su compañía.

Hoy está triste. No tiene la depresión de otros días cuando la Muerte le arrebató la esperanza en un mundo amoroso mejor. Quizás entonces yo no supe entenderlo, pero juro que traté por todos los medios de hacerle feliz, de ser el olvido que necesitaba su corazón, de ser quien pudiera amarle como merece su ser espiritual. Pero hoy está otra vez aquí. Estamos llenos de confusión. No sabemos comprender qué nos pasa cuando nos acercamos los cuerpos tanto como para sentir la temperatura del otro. No sabemos por qué no rechazamos los cariñitos ("que siempre me han parecido una mariconez"). No sé por qué acepto y entiendo que tenga otro compañero. Entiendo que me duela que le haga daño (más moral que físico) pero no me alegra que su relación se deteriore. No quiero estar en medio, pero no me muevo ni un milímetro de ahí. Me asustan sus miedos. Me asusta que no tenga respuestas para mí. Me asusta que recurra a mis palabras y a mis brazos y no poder hacerle sentir cuánto quisiera que fuese solamente para mí. Me asusta la incertidumbre de que podamos dañarnos en vez de crecer juntos. Me asusta no ser el hombre que le haga sentirse amado, deseado y querido como ningún otro en el mundo. Me asustan sus miedos y, sobre todo, los míos.

Como quisiera estar libre de prejuicios, ignorante de las opiniones de los demás. Dispuesto a darle todo: Decidido a entregarme sin dudas a ese ser que me abraza y me abrasa el alma con cada gesto, con cada palabra, con cada mirada. Qué tan rico fuera que pudiéramos hablar con el corazón despojado de las amargas experiencias de su pasado, de mi pasado y de nuestro pasado, para que fuésemos dos solos, rodeados de océanos de gente y de circunstancias que no pudieran tocarnos. Que simplemente estuviésemos ahí, dueños del mundo, y dueños el uno del otro, para que nada ni nadie pudiese ponernos reglas. Que el Amor, sí, ese Eros que ató a Adriano y a Antínoo, fuese el mismo que nos atara para siempre y fuésemos los dioses a los que se les erigen estatuas y ciudades para eterna memoria.

Puede parecer absurdo para quienes conocen los detalles de esta historia, que yo pretenda revivirla a pesar de todo y de todos. Pero no me importa. No me importa porque me hace sentir más vivo, con más capacidad en los pulmones y en la mente, con más energía para comenzar de nuevo. No me gustan los estados de ansiedad, pero este lo estoy disfrutando. Dicen que mañana se acaba el mundo: ¡Bah! ¡Basura! El mundo se acaba cuando se nos acaba el Amor. Y yo lo tengo guardado. O sea que no me puedo morir.

Si volvió... ¿era mío?



Medellín, 1o de agosto de 1999.
7:05 p.m.

miércoles, 6 de febrero de 2008

El Lado Oscuro del Corazón

El Lado Oscuro del Corazón es una de mis películas favoritas. De esas que veo una y otra vez y siempre me despiertan nuevas sensaciones. Creo que la ví por primera vez en el año de su estreno y la repetí de inmediato para copiar algunos de sus textos. Me gusta por la historia, por las poesías, por Nacha Guevara, por Mario Benedetti, por ese color negroazul que la domina, quizás porque refleja lo que muchos andamos buscando incesantemente y no encontramos: Otro ser que sepa volar y, aún más, que no le dé miedo hacerlo.

"Me importa un pito que las mujeres tengan los senos como magnolias o como pasas de higo; un cutis de durazno o de papel de lija. Le doy una importancia igual a cero, al hecho de que amanezcan con un aliento afrodisíaco o con un aliento insecticida. Soy perfectamente capaz de soportarles una nariz que sacaría el primer premio en una exposición de zanahorias; pero eso sí, y en esto soy irreductible, no les perdono, bajo ningún pretexto, que no sepan volar. ¡Si no saben volar pierden el tiempo conmigo!"

"La esperanza es tan dulce, tan pulida, tan triste; la promesa tan leve, no me sirve (...). No me sirve tan mansa esperanza, la rabia tan sumisa, tan humilde, y jugar tan prudente no me sirve. No me sirve tan sabia tanta rabia".

"Yo también te quiero, pero puedo quererte sin tenerte".

"...¿cómo amar sin poseer, cómo dejar que te quieran sin que te falte el aire. Amar es un pretexto para adueñarse del otro, para volverlo tu esclavo, para transformar su vida en tu vida. ¿Cómo amar sin pedir nada a cambio, sin necesitar nada a cambio?".


Rostro de vos

Mario Benedetti

Tengo una soledad
tan concurrida
tan llena de nostalgias
y de rostros de vos
de adioses hace tiempo
y besos bienvenidos
de primeras de cambio
y de último vagón
tengo una soledad
tan concurrida
que puedo organizarla
como una procesión
por colores
tamaños
y promesas
por época
por tacto y por sabor
sin un temblor de más
me abrazo a tus ausencias
que asisten y me asisten
con mi rostro de vos
estoy lleno de sombras
de noches y deseos
de risas y de alguna
maldición
mis huéspedes concurren
concurren como sueños


El Lado Oscuro del Corazón, Argentina,1992

Dirección: Eliseo Subiela.

Guión: Eliseo Subiela según poemas de Mario Benedetti, Oliverio Girondo y Juan Gelman.

Intérpretes: Darío Grandinetti (Oliverio); Sandra Bellesteros (Ana); Nacha Guevara (La Muerte).

lunes, 4 de febrero de 2008

Amigos, simplemente amigos

"Existe una teoría infalible sobre los amigos y es que hay que saber bien qué se puede esperar de cada uno". Esta frase de Carmen Posadas en Xl Semanal, es la manera de comenzar su explicación de por qué afirmó en su momento que ningún amigo le falló en momentos de adversidad, porque "nadie falla si sabe uno qué esperar de cada persona y no pide peras al olmo".

Estoy completamente de acuerdo con la columnista en que "hay amigos a los que podemos llamar a las cinco de la mañana para que nos consuelen de un mal de amores. Otros que son como una tumba y sabemos que nunca divulgarán una confidencia. Algunos (raros, pero los hay) a los que podemos acudir en un apuro económico. Y, por fin, amigos que siempre hablarán bien de nosotros para lo que pase. Lo que no se puede esperar, sin embargo, es que el que nos consuela sea una tumba o que el que nos presta dinero hable bien de nosotros, ni que el que habla bien de nosotros se plante en nuestra casa a las cinco de la mañana cuando nos da el mal de amores. Cada uno sirve para lo que sirve y no hay que esperar más, so pena de llevarnos el consabido chasco".

Tiene razón: Hay gente más generosa y gente más egoísta. Pensamos que todos los amigos con incondicionales y que nunca fallan. Y es un error de nuestra parte no tener en cuenta que cada uno es como es y nos da lo que puede y quiere darnos. El ideal es creer en la gente, confiar. Porque, "si uno sabe qué esperar del otro, ese otro nunca falla. Además, cuando uno no espera nada o casi nada, todo lo que reciba será siempre un regalo maravilloso".

Yo tengo, creo que como todos, amigos de alma, amigos temporales, amigos incondicionales (aunque Carmen Posadas no crea que existen), amigos todoterreno, amigos virtuales y amigos reales, amigos nuevos y amigos de hace más de 20 años. Cada uno en su línea. Prefiero a unos sobre otros, dependiendo de la situación y del momento. Pero lo que sí es cierto es que un par o tres de ellos son de oro, son los llamados mejores amigos y son mi tesoro. Y por ellos, ¡hasta la vida misma!

viernes, 1 de febrero de 2008

Te aviso, te anuncio...

"Pase lo que pase,
mantente con vida;
iré a buscarte.
Por mucho que me cueste,
por muy lejos que estés,
te encontraré."
Para tí, que a veces te cansas de todo. Para el Amor, que a veces se me escapa. Para la Felicidad, tan esquiva. Para...

A veces llegan cartas (2)

Esta tampoco es mía. Pero continúa emocionándome la claridad de pensamiento y de acción de la autora. Y, a riesgo de parecer cursi su contenido y este blog, la publico. El amor de los demás puede percibirse empalagoso... pero ¿qué importa eso a los amantes/amados?

G:

Alguna vez me hablaste de leer algo de lo que yo escribo. Pues aprovecha, que no es novela, pero es así. No es cuento, pero uno siente cuando la gente no está, y no me sorprende que estés en "negociaciones" con M. Ya lo dice el fanoso poeta: "Me gustas cuando callas porque estás como ausente"; en tu caso, "me duele cuando callas porque estás con M.".

Tú creíste que cuando yo decía algo estaba hablando con palabras vacías. Crees que la vida me ha dado la ocasión de hablar con la palabra vacía. Los cuenteros, los poetas y otras variedades de la especie humana no podemos darnos ese lujo: Cuando yo digo que amo, amo; cuando puedo soñar, sueño; cuando hablo de tener un hijo es porque es así.

El que nunca me dijeras "te quiero" yo lo entendìa como una incapacidad de expresar el afecto, en ocasiones hasta una cierta pereza de caer en el mundo de lo cursi; pero ahora me doy cuenta de que no es así y te lo agradezco. Estabas siendo franco, al menos no dices lo que no sientes; y si lo dices en en momentos tan casuales como cuando me quise ir para México, me diste a entender que querías que estuviera. Sos egoísta, querías que estuviera con vos como respuesto inflado por si acaso, como desvare para un impase con las negociaciones: Así no se trata a la gente, menos a los amigos. El hecho de que alguien te ame incondicionalmente, como yo, no quiere decir que en la cláusula de incondicionalidad estés autorizado para hacer y deshacer con lo que esa persona te da.

Me doy cuenta de que a tí sólo te raspan las cosas, ¿o es que realmente es tan difícil expresarte, aceptar que te hacen daño o que te hacen falta? Espero que con M. no sea así, que seas más libre porque el maldito silencio no lleva a nada; y nada, por obvio que parezca, se da por dicho o hecho.

Pienso que es gracioso. Nos juntamos los que eran: , no sé por qué, no te comprometes (en el buen sentido de la palabra), tal vez sientes que se te escapa la vida; y yo no lo hago porque siento que la vida se me está acabando. Pero mientras eso pasa, no me le tuerzo a nada, ni a querer, ni a equivocarme, ni a mover un catre.

Yo no quería compasión y tampoco quería ni una pizca de indulgencia, sólo la verdad. Y de repente se me pasa por la mente: "Que te dio pesar decirme... que no sabías cómo... qué cagada con L..." . G, yo no necesito paños de agua, la vida no son mentiritas piadosas, ni protocolos, ni frases maquilladas para quedar bien o no hacer sentir mal y no te preocupes que de amor no muere nadie y menos yo.

Y me pregunto, si sos mi amigo, si de lo poco que me conoces aprendiste a ver mi pasión por la vida, por qué no pensaste en hablarme claramente, por qué no pensaste: "Le voy a decir que no bote corriente, que busque a alguien que la quiera y a quien pueda querer, con quien pueda construir aunque sea el tiempo que le toque vivir".

Nunca sientas pena ni te de pena decir que no. Sí, es muy mal hecho decir palabritas comprometedoras que no se sienten, pero duele más que no te digan la verdad y darse cuenta de que no navegabas, de que permaneciste anclado y el agua llegándote al cuello. Es tan importante decir te amo, como decir no te amo. (Este consejito casi terapéutico así no más y te lo doy gratis).

(...)

De pronto se me ocurre que estás esperando algo así como una despedida de mi parte, un "esto se acabó" y así respirarías más tranquilo. Hubiera querido que me lo dijeras tú, y no es que no quiera que respires tranquilo; al contrario, así a los dos nos sirve: A tí para (...), definir tu vida con M y darte cuenta qué es lo que realmente quieres y que el estar con una sola persona ni te quita ni te pone; y a mí, para cerciorarme que de pronto de este cuento aprendí algo.

Tienes de mi parte todo el espacio libre.

Te quiere,

N.