viernes, 18 de enero de 2008

El Amor en los Tiempos del Cólera

Sé que es muy difícil llevar a la pantalla de cine la literatura de Gabriel García Márquez. Él es un escritor que puede producir en el lector múltiples sensaciones, desde el "olor de la guayaba" de su Aracataca natal, el color de "ojos de perro azul", las plumas de "un hombre muy viejo con unas alas enormes" y la enigmática belleza post-mortem del "ahogado más hermoso del mundo". Todo sin que el lector proteste, sin que sienta que le están alterando su adquirida noción de la realidad. Cosas de lo que han llamado Realismo Mágico.


Pero parece que el cine, con todos sus efectos especiales, no ha podido acertar recreando sus obras. Muchas cosas aparecen artificiales, como si los cuentos y novelas del premio Nobel colombiano hubieran sido creadas sólo para la lectura, ese acto personal en el cual uno se mete a imaginar con el autor, creando en la mente cada escena y cada personaje. Me pasó eso con El Amor en los Tiempos de Cólera, en la versión cinematográfica recién estrenada. A lo mejor el problema está en la dificultad para alejarme de las imágenes que tenía en la mente, creadas por la lectura de hace muchos años en mi época universitaria. Quizás porque en el fondo esperaba a los actores hablando en castellano con acento costeño (del de Cartagena de Indias), no en inglés. La verdad es que esperaba más, insisto, porque llevaba a la sala el texto y las imágenes visuales metidas en la cabeza.


Pero si me quitase ese "prejuicio", hubiera visto una bella historia de amor, de esos amores resistentes a los daños y a los años. Una peli para verla tomado de la mano de alguien que te gusta, deseas o quieres. Una peli que me emocionó por ver en ella esas "callecitas de Cartagena llenas de historia", ese majestuoso río Magdalena, ese verde abrumante de las sierras de los Andes, esas casonas coloniales con sus patios, sus fuentes y su misterio. Una película a la que se le pueden excusar alguno que otro error "histórico", porque las cumbias y la hermosa voz y composiciones de Shakira (otra colombiana universal) hacen que el corazón sienta que la pasión no muere.


Apartes de un documental emitido en "Señal Colombia" sobre la vida de uno de los mejores escritores (vivos) del mundo. 2007

3 comentarios:

  1. COmo todo libro .. es dificil llevarlo al cine .. sobre todo si el expectador esta siempre comparandolo con su imagen de lo que para el sucedio .. y mas si se trata de GABO donde la descripcion lleva al limite de hacer pensar que cada uno tiene su propio macondo .... sus propias calles, su propio árbol ... sin embargo hay cosas que rescatar.. fotografia, musica, actuación de barden ... etc

    Saludes

    JHON

    ResponderEliminar
  2. ..... a shakira le podemos perdonar su mala voz y su desafine.... a Gabo se le puede perdonar ser amigo de Fidel.... a los productores nos tocara perdonarle la "gringada" en el lenguaje que se tiró esta pelicula... pero por demás me gustó.
    El post anterior: PERO CLARO!!!! DEBEMOS DEJAR CLARO QUE LOS BUENOS SOMOS MAS, Y PODEMOS HABLAR DESDE UN PALCO O CONTRA UN MURO COMO DICE LA CANCION.
    Del post más anterior: JAJAJAJAJ aquello de la risa que solo las locas y la monalisa sabemos dar!!! buenisima... te robare esa frase!
    Besos desde mi lejana galaxia donde por problemas tecnicos estabamos más lejanos que nunca.

    ResponderEliminar
  3. y aclaro.... juntar a Shak y a Gabo fue inmejorable!
    (que guapa se ve en aquel video)

    ResponderEliminar