jueves, 31 de mayo de 2012

Las parejas gay colombianas podrán besarse en público, según fallo de la Corte Constitucional.


EFE | Bogotá

La sentencia, divulgada hoy en la página web del tribunal, rechaza la conducta de los encargados de seguridad que el pasado 19 de enero de 2011 reprendieron a la pareja por darse un beso y un abrazo en un asiento de un centro comercial en Cali.

"Yo respeto su forma de pensar, pero ustedes tienen que comportarse o si no tienen que retirarse del centro comercial, porque aquí hay familias y niños", dijo uno de los vigilantes, según lo expuesto en la decisión.

El Constitucional expone en la sentencia C-577/11 que
"el trato dado por el guardia pretendía anular o dominar a los jóvenes homosexuales, apelando a prejuicios sociales y personales de que sus besos de pareja en público son reprochables al resultar más afrentosos para la tranquilidad, la seguridad y la moralidad públicas que los besos que se dan los heterosexuales".


 
Con esa advertencia, restringió el derecho de la pareja a "expresar libremente sus opciones vitales" y consideró que con el hecho de besarse "no pudieron haber puesto en riesgo los derechos de los demás, los derechos de los niños, ni tampoco en general el ordenamiento jurídico".

Además, el tribunal señala que no es competencia "del poder de vigilancia y defensa" defender "los intereses de la copropiedad, la restricción de ámbitos de libertad individual y de respeto a la igualdad y a la diferencia".

Los aludidos, acompañados por abogados de organizaciones no gubernamentales que defienden los derechos de la comunidad LGBT (Lesbianas, Gay, Bisexuales y Transgeneristas), reclamaron ante la Corte Constitucional su demanda después de que fuese rechazada en primera y segunda instancia en abril y mayo, respectivamente, de 2011.

El fallo consideró que tanto el centro comercial como la empresa de seguridad que presta allí su servicio deben
"asumir la responsabilidad como particulares por ejercer poder de subordinación o indefensión frente a la pareja, por la vulneración especialmente afrentosa que han sufrido sobre su derecho a la libertad y a la igualdad fundamentales".

Además, les ordenó organizar un curso de formación en derechos humanos para sus empleados.

Por otra parte, el pasado miércoles el Constitucional dirimió que el periodista estadounidense Chandler Burr recuperara la custodia de dos menores que adoptó después de que un juzgado de la capital colombiana en julio de 2011 decidiera quitárselos por su orientación sexual, lo que ratificó un mes más tarde el Tribunal Superior de Bogotá.

Información tomada del blog Temas de Conversación Gay.

Petición


sábado, 26 de mayo de 2012

Gran Hermano 12+1, Noemí y el precio de la fama


Noemí Merino, GH 12+1:
Canaria, surfera y desquiciada

No siempre he seguido la invitación al voyerismo de Gran Hermano, pero es casi imposible evitar darse de bruces con este programa de Telecinco. No basta con las galas, los debates y los avances diarios; de ellos hablan en otros espacios de la cadena y hasta en el noticiero, sin dejar de lado los blogs de sus colaboradores, twiteros, facebookeros y demás. Mercedes Milá, su presentadora, ha repetido hasta la saciedad que esta "tele-realidad", es un experimento sociológico y he estado a punto de creérmelo en esta edición. Un experimento en el que 12+1 concursantes (pura triscaidecafobia) se encierran en una casa durante tres meses y los televidentes se dedican a mirar cómo se duchan, duermen, comen, discuten, tienen acercamientos erótico-festivos, se odian y se quieren con la misma rapidez y cambian de objetivo "amoroso" como quien cambia de camisa.


Por quince minutos de fama o de popularidad, muchas personas se arriesgan a lo que sea. No en vano, son millares los aspirantes a entrar en la casa y sólo dos decenas los escogidos. ¿El criterio de selección? Que sean frikies, transexuales, gays, lesbianas, curas, góticos, que se les pueda salir el lado macarra, que huyan del pudor, que no les importe ser el centro de todas las miradas y comentarios. Todo por un puñado de euros y con la intención de seguir ganando dinero paseando por programas de cotilleo (prensa del corazón los llaman).

Pero esto es de sobra conocido. Lo que me ha indignado estos días son las escenas relacionadas con Noemí, una concursante de las Islas Canarias, cuyo encierro en Guadalix de la Sierra, ha sacado a la luz sus más profundas debilidades, en las cuales se ha centrado todo el espectáculo. Esta chica se ha enamorado de un italiano que no le da ni la hora (bueno, alguna hora de gustito en los bajos sí) y luego, en intercambio con GH Brasil, ella sí se le dió alegrías a otro concursante de allí. Regresó con su secreto muy mal guardado (sólo lo vieron unos cuantos millones de brasileños y españoles) y al verse pillada en sus "pecados de pensamiento, palabra, obra y omisión" se desataron en ella los síntomas de depresión y ansiedad y ha sido sometida al juicio de muchas personas dispuestas a señalar con el dedo los fallos de otras, olvidando aquello de "quien tiene rabo de paja no se arrima a la candela".

Alessandro, GH 12+1:
Italoespañol, exfutbolista
y acosado
Noemí llora, ríe, provoca, se desnuda, acosa, mete mano, invita al exhibicionismo ("enséñale a fulana la anaconda que he tenido entre mis piernas"), sigue a la ducha a Aless, el objeto de su deseo, o le pellizca los genitales. Niega rotundamente que haya hecho nada malo, porque se siente libre de hacer lo que le venga en gana. (Pero si fuese un hombre el que hiciera eso a una mujer, su expulsión y lapidación hubiera sido inmediata. Cosas de la igualdad). Y enfrente, cientos de mirones critican, señalan, queman en hogueras mediáticas y disfrutan con las absurdas decisiones de supuestos profesionales de la sicología que permitieron que regresara a la casa en su indiscutible estado de mala salud mental.

Y lo que más me ha indignado es que crean que periodismo sea acosarla en un aeropuerto, insistiendo en preguntarle cómo se siente después de haber sido sacada del plató por su madre, aunque se le vea medicada y agobiada. El personaje (que dejará de serlo en pocas semanas) contestaba con educación: "Ahora no quiero hablar, gracias", pero el aprendiz de periodista amarillista la seguía, le repreguntaba, desde la salida del avión, por todas las salas del aeropuerto hasta la puerta del coche, para luego apostarse a la entrada de su casa.


Si este es un experimento sociológico, sicológico o antropológico, y si fuese un verdadero espejo de la realidad cotidiana, apaga y vámonos. En el espectáculo todo vale, parece ser la máxima. "En la casa todo se magnifica" es ya un lugar común. Los concursantes tranquilos, equilibrados, sociables, serenos, no dan juego ni morbo. Y si en el camino se dejan juguetes rotos y vidas deshechas, no importa. El año próximo habrá más aspirantes, más audiencia y más dinero para la productora. ¡Que esto es televisión! Y, por lo visto, de respeto por los humanos no se trata este negocio.

miércoles, 23 de mayo de 2012

Soledad, esa loba traicionera


A estas horas dos cuerpos se desean
agitadamente.
En las sombras de un cuarto con olor a semen,
espejos invisibles observan cómo aquellos se devoran.
Después, un rictus de amargura,
sólo momentos agitados.
No es el amor lo que los llama.
Es la soledad, esa loba traicionaera.
Por calles desiertas y oscuras
cuerpos distantes parten por caminos diferentes.

martes, 22 de mayo de 2012

Me cansé


Para los impuntuales, para los que no llegan, para los que se asustan, para los que se tienen miedo, para los que no contestan, para los que ignoran, para los egoístas, para los malquerientes, para los "yo soy así", para quienes no merecen que se les espere...

lunes, 21 de mayo de 2012

Poemas de nochero


Una noche igual
pero distinta
porque a todo le dio por extrañarte:

La gota de ron en el café
tantos bares
tantos cuartos
tantos gemidos
tanto Silvio, Serrat
afilando la palabra
y enseñando
que uno se puede morir de amor.

Una noche igual
pero distinta
sin tu abrazo y su energía
y continuar batallando solo
trescientos sesenta y cinco noches días
con las manos
empujando mi velero

Nadia: debo admitir
que no consigo
matarte en la memoria.


Héctor Fagot
Poeta colombiano
(Fredonia, Antioquia, 1961)

jueves, 17 de mayo de 2012

El Unicornio Blanco


"Mi unicornio azul ayer se me perdió,
pastando lo dejé y desapareció.
Cualquier información bien la voy a pagar,
las flores que dejó
no me han querido hablar".


Silvio Rodríguez

Como todas las mañanas, el marido fue el primero en levantarse. Bajó las escaleras de la casa, fue a la cocina y prendió la cafetera para hacer el café. Y, como todas las mañanas, corrió las cortinas para ver cómo estaba el día y escoger el color de su corbata. Cuando vio que en el antejardín de su casa había un unicornio blanco con un cuerno dorado en la frente, comiéndose las flores. El hombre pensó que estaba soñando. Se estregó los ojos, pero era verdad. Abrió la puerta y se acercó. El unicornio, que se estaba comiendo una mata de novios, meneó la colita. Él estaba fascinado. Rápidamente pensó: "¿Pero mi esposa se está perdiendo esto?".

Subió las escaleras. Fue al cuarto, donde la mujer todavía estaba roncando entre las sábanas. Tocándola, le dijo: "Mi amor, abajo, en el antejardín hay un unicornio que tiene un cuerno dorado en la frente y come flores". Pero ella en medio de un ronquido le dijo: "Los unicornios son animales mitológicos". A lo que él le respondió: "Bueno, tú te lo pierdes"

Bajó corriendo las escaleras, fue al jardín y esta vez el unicornio se estaba comiendo la orquídea preferida de su señora. Pero a él no le importó. "¿Pero cómo se va a perder esto mi mujer?". Volvió a subir rápidamente al cuarto y le dijo: "Mi amor, no te lo pierdas". Esta vez la mujer se sentó en la cama, lo miró fijamente y le dijo: "Cada vez estás más raro y más loco. Te voy a dar una lección."

-"Tú te lo pierdes", le contestó. Bajó corriendo las escaleras, fue al jardín, pero el unicornio había desaparecido.

Una hora después, los dos estaban desayunando en el comedor. Tocaron la puerta. Eran el psiquiatra de la familia con un enfermero que traía una camisa de fuerza. El médico preguntó cuál había sido el motivo de la llamada y la señora empezó a decir: "Vea doctor, es que mi marido se la pasa pensando que los haiku, que la poesía, que los cuentos. Ahora resulta que está diciendo que en esta casa hay un unicornio blanco con un cuerno dorado en la frente comiendo flores". El médico le preguntó al señor: "¿Y usted qué puede decir a eso?". El señor le contestó: -"Doctor, los unicornios son animales mitológicos!".

Entonces, a la orden del psiquiatra, el enfermero le puso la camisa de fuerza a la señora y se la llevaron para el manicomio porque estaba deschavetada.

(Anónimo)

miércoles, 16 de mayo de 2012

Sabiduría grafitera


"No soy rencoroso,
pero siento alivio cuando veo
que un enemigo descansa en paz".

"Lo importante es ser feliz,
no por dónde entra la felicidad. (Gay de clóset)".

"Se vengó tanto que se le acabó en rencor".

"Los amores imposibles son los únicos  que se cuentan,
porque los felices se resuelven en una sola frase:
Y fueron felices".
Nota: Fotos de la serie "Zaragoza Grafitera".
Autor: Merlín Púrpura.

martes, 15 de mayo de 2012

El cuerpo autónomo


"El cuerpo es el mínimo y el máximo territorio autónomo que tenemos. Por eso existe el piercing, los tatuajes, la moda".

Jaime Cerón,
Curador VIII Salón de Artistas Jóvenes,
Bogotá, Colombia



lunes, 14 de mayo de 2012

Frasecitas para pensar


"Sexy es el hombre
con el que una tiene ganas de hacer el amor
cuando lo ve vestido".
María Félix
   
"Es mejor ser infeliz estando sola
que serlo con alguien".
Norma Jean Baker,
más conocida como Marilyn Monroe.
   
"La mujer de mi vida soy yo".
Miguel Bosé.

"¡Qué vaina para las separadas!
Los buenos partidos, exitosos y riquitos, están casados;
los divorciados no quieren repetir;
los muchachos tienen fuerza sexual, pero poco billete. Punto."
 Poncho Rentería.

sábado, 12 de mayo de 2012

Tenía ganas de morirse

"Tenía ganas de morirse. Como si adivinara que no podía sobrevivirlo. Sin él, el aire sería insuficiente. Tenía miedo de habitar un mundo donde no estuviera NN. No sé si esto era Amor o se trataba de ese acostumbramiento que es el más semejante sustituto del Amor. O si era una división de tareas tan estricta entre uno y otro, de dos seres que siempre han permanecido juntos, que cuando uno de los dos presiente que el otro le va a faltar, se enfrenta al horror del vacío, a la impotencia para realizar por sí mismo las tareas que correspondían al otro, a la certeza de no poder ver una madrugada sin percibir la respiración de su otra mitad que duerme al lado (...)

Bien podía ser un extraño gesto de egoísmo: permito que tengas el dolor de mi muerte, porque soy incapaz de sobrellevar el dolor de la tuya. O de valentía: Ven, no temas a la muerte, yo te abro el camino, allá te espero cuando pierdas el miedo de morirte, que es lo único que te ata a la vida. "

Cartas Cruzadas

jueves, 10 de mayo de 2012

¡Está como quiere! (¡o como quiero yo!)


Shemar Moore,
el de Mentes Criminales

Shemar Moore ha declarado sobre su presunta homosexualidad tras la publicación de algunos desnudos en la revista People:

"Mira, no tengo problemas ... Con lo que sí tengo problema es con que quieran hacer noticia de este asunto. Voy a decirlo ahora: no soy gay. Ni siquiera un poco. Me encantan las mujeres. Las mujeres son la mayor creación de Dios."

sábado, 5 de mayo de 2012

Ya no te quiero

"Llega como un zarpazo, nos quedamos de una pieza y el corazón se encoge. "¿Será que escuché mal?", "¿Cómo así?", "¿Qué estás diciendo?". Nos resistimos a semejante información: "¡No puede ser!" Preferimos pensar que es un efecto transitorio debido a los años, el tedio y la rutina. Nos negamos a aceptar que el amor se acabó.

Pero, sí. Se fue, desapareció, se esfumó en un montón de silencios mal interpretados, en la aflicción que nunca se dijo. "Ya no te quiero": una estocada directamente al alma.

Pedro amaba profundamente a su novia, según él, era el motivo de su existencia. Creía que todo estaba bien. En las últimas relaciones sexuales, ella le había manifestado su amor de una manera especialmente efusiva. Había pensado en casarse, todo iba viento en popa. De pronto, sin previo aviso, sin anestesia, bañada en llanto, aquella mañana ella le confesó su inexplicable desamor.

El desamor, como el amor, también se declara, se cuenta como un cuento corto, terriblemente condensado. Cortante, lapidatorio, cruel. Siempre es cruel, no importa que se le adorne con lágrimas de piedad o cantos de penitencia. Para el despachado nada justifica el rechazo afectivo, las palabras pierden su semántica, se caen los significados, se adormece la inteligencia. "¿Cómo así que ya no me quieres!", "¡Debe haber un error!".

¿Un error del corazón, un exabrupto de la razón? No, ninguna equivocación. "Pero, ¿estás segura?" (la esperanza de la desesperación, la ingenuidad de quien no quiere ver, creer ni escuchar), "¡No puede ser...!".

Juliana lleva ocho años de novia. La pareja ya tenía apartamento, enseres, fecha de matrimonio y lista de invitados. Ha sido su único hombre, su único amante, su mejor amigo, su vida. Él es el eje, ella el satélite. El amor la mueve, la empuja en forma elíptica con movimiento constante y parejo. Un día después de su cumpleaños, él le dice que no está seguro. Ella racionaliza el problema, busca explicaciones, recurre a la ciencia, a las brujas, le pasan el láser, se apega al sicólogo, el siquiatra le formula un puré de pastillas, el cura le habla del más allá, y una amiga la acompaña en su dolor en el más acá. No hay reversa, nada qué hacer.

Él dice: "No sé qué pasó, no tengo explicación; se abrió un hueco en mi corazón, no hay otra mujer, ni siquiera en vista". Ella le suplica que lo intenten de nuevo, sugiere que le pasen a él también el láser y que el siquiatra le dé un antidepresivo. Pero el mensaje sigue siendo tan contundente como al principio: "Ya no te quiero", categórico, irrevocable.

¿Por cuáles  caminos se nos va el amor? ¿En qué recodo se nos pierde? Como un suspiro agónico, travieso, a veces se desvanece como una sombra en la tormenta. No hay culpa en el desamor, pero sí en el descuido del no aviso. El otro tiene derecho a la información oportuna.

Pero lo increíble de todo este revuelo devastador, lo que no me deja de asombrar, es el poder de la recuperación afectiva. El corazón herido siempre se cura, y su medicina, curiosamente, es el mismo amor que llega arropado en otra forma humana. El amor nunca nos deja, las personas sí."

Sicólogo clínico, docente y escritor.

miércoles, 2 de mayo de 2012

Dime

Añoranza de Ojos Azules.
Porque sí.


Dime por favor dónde estás,
en qué rincón puedo no verte,
dónde puedo dormir sin recordarte
y dónde recordar sin que me duela.

Dime por favor dónde pueda caminar
sin ver tus huellas,
dónde puedo correr sin recordarte
y dónde descansar con mi tristeza.

Dime por favor cuál es el cielo
que no tiene el calor de tu mirada
y cuál es el sol que tiene luz tan solo
y no la sensación de que me llamas.

Dime por favor cuál es el rincón
en el que no dejaste tu presencia.
Dime por favor cuál es el hueco de mi almohada
que no tiene escondidos tus recuerdos.

Dime por favor cuál es la noche en que no vendrás
para velar mis sueños...
Que no puedo vivir porque te extraño
y no puedo morir porque te quiero.

Alexis Martín Amador.

martes, 1 de mayo de 2012

Te saludo, mi pequeñ@

"Meses atrás quise enviarte una carta, pero finalmente deseché de hacerlo: luego de escribirla comprendí que había puesto mucho énfasis en el estilo y, como es de esperarse, se malogró. Una carta con estas características está buena para una casa editorial. No para su explícito destinatario. Ahora pondré énfasis tan sólo en aquellas verdades del corazón, lo que me asegura saber que pronto llegará a tus manos.

Ya ha pasado el tiempo de los pensamientos feroces, y vaya si las cosas toman una nueva envoltura. He vuelto a mis pretéritas labores de jardinería: riego las orquídeas sagradamente todas las mañanas, sin afán. Es como si la tristeza se hubiese enfadado conmigo y hubiese decidido buscar nuevos aires quién sabe en qué otro corazón. Esperemos que se demore lo suficiente como para que las orquídeas maduren, porque sin duda volverá.

Por el momento, a pesar de nuestros caminos desviados, sin esperanza a que se vuelvan a cruzar ya nunca jamás,me siento tranquilo; casi feliz. Me he puesto a pensar en estas noches de insomnio prolongado, mientras la sutil lluvia de estas madrugadas golpea rítmicamente el techo de mi desnuda habitación, la razón de este cambio de ánimo tan radical, y no se me ocurre otra cosa que ligarlo con la felicidad enorme que me produce saber que he  experimentado, como pocos, ese hormigueo subiendo por mis pies y acentuándose en mi vientre cuando te veía. Dicen algunos que eso debe ser el Amor. Yo digo que es malestar necesario para entender gran parte de la vida. Un malestar que probablemente nunca hubiese podido sentir sin tu generosa ayuda y que de alguna manera, ha justificado mi vida misma.

He pasado días maravillosos bajo el abrigo de tu cuerpo desnudo, por eso tan sólo era creyente cuando llegaba la noche, por fría y melancólica que pareciera. Todo lo demás era tan irreal y tan confuso... Contigo ni siquiera la enfermedad me podría haber doblegado. Pero esos tiempos se han diluido tan rápido como se diluyen los buenos propósitos en el hombre. Sin embargo, queda el recuerdo feliz y el hecho de saber que tu aroma sigue clavado en mis sábanas desteñidas. Con vos supe que para aligerar la vida no se necesitaban libros, que sólo era necesario una mujer desnuda flotando en medio de la noche. Un poco de piel y  de lágrimas  que hagan posible el milagro.

Bueno, dejémoslo así. Sé que te alegrarás con lo del jardín. Escríbeme de vez en cuando, extraño tus ya famosos ataques de melancolía.

Felices días. Con profundo amor,

Asterión"

Autor: Fabio Andrés Hurtado
Carta ganadora del concurso de cartas de amor (2005)
convocado por la Biblioteca de Comfenalco.