viernes, 23 de julio de 2010

Esquela

Ojeo el periódico mientras tomo un café, de paso al trabajo. No suelo mirar las esquelas de defunciones, básicamente porque no me interesan. Siempre he dicho que no podré leer la mía (y no sería tan rimbombante como las de España). Pero hoy me sorprendí al ver mi nombre y primer apellido en una del Heraldo de Aragón, uno de los diarios de Zaragoza. La coincidencia es solo de nombre: No tengo 85 años (ni espero llegar a esa edad), ni soy viudo, ni tengo hijos, ni he estado nunca en Ejea de los Caballeros.

Solo coincido con mi homónimo en que también he de morir. Como todos. Cosas afortunadas de la democrática y reseca muerte.

3 comentarios:

  1. Hola amigo. Casualmente he pasado por tu blog y devo decirte que es fantastico. Has conseguido que en una noche lea casi todos tus post con gran interes.
    Gracias por compartir tus sentimientos con los demas de esta maneta tan autentica.
    Abusando de tu amistad me gustaria tener tu consentimiento para publicar tu entrada "Ballenas o Sirenas" en mi blog. Me parece una entrada estupenda y con un importante mensaje.
    Un abrazo.
    Ricard

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  2. jaja lo que desde luego te separa del finado, cari, es que tu estas vivito y coleando...

    Bezos.

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  3. ...que tuto, no morirse, eso es lo de menos, pero llegar a ver tu muerte publicada en un periodico...

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