domingo, 30 de marzo de 2008

Qué tal si...

-Si usted pudiera cambiar algo acerca de su primera experiencia sexual, ¿qué cambiaría?

-Cambiaría casi todo. Cambiaría el pudor, el afán, el lugar y la edad. Cambiaría los mil sonidos periódicos y constantes, secos y chillones de ese colchón. Cambiaría la temperatura, cambiaría los calcetines tan feos que tenía, cambiaría más miradas y más minutos, apagaría la televisión. Cambiaría las decoraciones de Snoopi y Mafalda por velos vaporosos y en movimiento por un aire colado de las ventanas entreabiertas del desván. Cambiaría casi todo... menos a ella.
Alfredo Mejía Vélez.
En un Taller de Técnicas de Comunicación Escrita, "Qué tal si..."

viernes, 28 de marzo de 2008

La Ciudad de la Eterna Primavera

Medellín. La Ciudad de la Eterna Primavera. La Ciudad Industrial de Colombia. La Tacita de Plata. Mi Patria Chica. Es la ciudad que más me gusta, porque es la mía y porque allí he dejado pedazos del corazón. Tengo otros afectos terrenales, pero de Medellín quiero sus calles, sus esculturas callejeras, su paisaje nocturno, sus avenidas, sus edificios emblemáticos, su cielo, sus montañas, su música, su marcha, su gente...

jueves, 27 de marzo de 2008

¿Un solo Amor?

Uno solamente se enamora una vez, aunque se enamore muchas veces. Creo que fue Vinicius de Moraes quien dijo que el Amor es eterno mientras dura. La verdad es que sobre el Amor se dicen tantas tonterías a diario, que a veces acabamos creyéndolas. Y Montaigne decía que el Amor es el deseo irreprimible de lograr la Amistad de alguien que nos atrae por su hermosura. Y nadie ha dicho nunca que sólo se puede desear la Amistad una sola vez en la vida. El Amor es una fuerza tan esencial en el ser humano, que pretender encauzarla o categorizarla no deja de ser una tontería. Se Ama cuando se Ama. Y se olvida cuando se olvida. Lo demás, a mi juicio, son letras de boleros o argumentos de televisión.

Benito Sánchez, entrevistado por Matilda Puentefuerte, en revista Cromos.

miércoles, 26 de marzo de 2008

Lo que me gusta de Zaragoza, mi otra ciudad


Estas son imágenes de Zaragoza. Una Zaragoza donde vivo hace más de siete años. Aquí he reído y soñado. He sido amado y he amado, me han desamado y malquerido. En esta tierra he soñado, llorado y luchado mucho. Un lugar que le permite a uno todas estas cosas, es un lugar del que uno hace parte. Zaragoza, mi "otra" ciudad.

jueves, 20 de marzo de 2008

¡Ay, quién pudiera sentir como Sevilla!

"No quiero cantar mi puedo a ese Jesús del madero

sino al que anduvo en la mar..."



Semana Santa. Quizás la más famosa del mundo es la de España, y dentro de ella la de Andalucía. Recuerdo que siempre pasaban las imágenes por la televisión y contaban las historias de los "costaleros", del peso de los tronos, de las mujeres cantando saetas al paso de los "tronos". Todavía me debo esa experiencia, la de ir allí y repetir como el escritor aquello de "¡Ay, quién pudiera sentir como Sevilla!" Nada más ayer me impresionó, como otras veces, ver la tristeza de los miembros de hermandades y cofradías, llorando porque la lluvia les impidió sacar a las calles a sus imágenes.

Y como España es una pluralidad de costumbres, tiene otras maneras de celebrar la Semana Santa. Si la de Andalucía es de un silencio abrumador, en Aragón, por ejemplo, los tambores de cada cofradía suenan a su modo, dándole a la ciudad (Zaragoza en este caso) un ambiente algo tenebroso. Pero no deja de ser el sentir (no me atrevo a decir qué tan religioso) de un pueblo. Y, por supuesto, es algo digno de vivir al menos una vez en la vida.

miércoles, 19 de marzo de 2008

En el Día del Padre

Para el padre de Daniel, mi sobrino.
Para el padre de Marcos, mi sobrino "afectivo".
Para el padre de Adriana.
Para el padre de "los Ramírez".
Para todos los buenos papás que hay por el mundo.
Y para las Mamás-Papás.
Hoy es el Día del Padre en España. Día de San José, padre putativo de Jesús (como reza la Novena de Aguinaldos). No es una de esas fechas tan "señaladas", como el Día de la Madre, aunque no deja de ser otra de esas oportunidades que aprovechan los comerciantes para hacer caja.
En muchos lugares es conocida la frase de "Madre sólo hay una y padre es cualquier h.p.", es decir, los maltratadores físicos y emocionales, los que compran lo que creen afecto de sus hijos con dinero, los que ocultan sus infidelidades con lujos, los que confunden hombría con machismo. De esos no quiero hablar.
Nadie ha nacido aprendido. Y para padre o madre no preparan a nadie ni la dan carné de idoneidad. También es cierto que son seres humanos y que los hijos a veces los juzgamos duramente (mientras más jóvenes más estrictos somos con ellos). Pero estoy seguro de que hacen lo que pueden, de la mejor manera que pueden.
Pero también hay que reconocer que "padrazos" todavía quedan. Me precio de conocer algunos, de los amorosos con sus hijos y con su esposa, que cimentan bien una familia, que pueden sentirse seguros, desde temprano, de que dejarán huellas positivas en el mundo. Porque obran desde la bondad de su corazón y desde el Amor. Y nada malo puede salir de ahí.


"A ese niño le falta mano dura". Pero mi papá le respondía: "Si le hace falta, para eso está la vida, que acaba dándonos duro a todos; para sufrir, la vida es más que suficiente, y yo no le voy a ayudar".

"...no es que uno nazca bueno, sino que si alguien tolera y dirige nuestra innata mezquindad, es posible conducirla por cauces que no sean dañinos, o incluso cambiarle el sentido. No es que a uno le enseñen a vengarse (pues nacemos con sentimientos vengativos), sino que le enseñan a no vengarse. No es que a uno le enseñen a ser bueno, sino que le enseñan a no ser malo(...) gracias a la benéfica influencia de mi papá, he podido ser un malo que no ejerce, un cobarde que se sobrepone con esfuerzo a la cobardía y un avaro que domina su avaricia".

lunes, 17 de marzo de 2008

American Beauty

Apariencias. Búsqueda (y mantenimiento a cómo de lugar) del éxito económico. Relaciones personales deformadas. Ganas de huir. Autoengaño. Son solo aspectos de una maravillosa película. De esas para ver una y otra vez, en distintos momentos de la vida. Lo mejor, es que se re-descubren conceptos, sensaciones, creencias y valores, que quizás estaban guardados por ahí en algún recoveco. Siempre queda, ante tanta basura, y hasta en medio de ella, la belleza, el sentimiento, la capacidad de asombro.



"¿Quieres ver lo más bonito que he grabado en mi vida?

Era uno de esos días en que está a punto de nevar y el aire está cargado de electricidad. Casi puedes oírla, ¿verdad? y esa bolsa estaba bailando conmigo, como un niño pidiéndome jugar, durante quince minutos. Es el día en que descubrí que existe vida bajo las cosas y una fuerza increíblemente benévola que me hacía comprender que no hay razón para no tener miedo jamás.

(...) a veces hay tantísima belleza en el mundo que siento que no lo aguanto y que mi corazón se está derrumbando."


"Siempre había oído que toda tu vida pasa ante tus ojos el segundo antes de morir. Ese segundo no es un segundo en absoluto. Se hace algo inmenso como un océano de tiempo...

...cuesta seguir enfadado cuando hay tanta belleza en el mundo. A veces siento como si la contemplase toda a la vez, mi corazón de hincha como un globo que está a punto de estallar. Pero recuerdo que debo relajarme y no aferrarme demasiado a ella. Y entonces fluye a través de mí como la lluvia y no siento otra cosa que gratitud por cada instante de mi estúpida e insignificante vida.

No tienen idea de lo que les hablo, seguro. No se preocupen. Algún día la tendrán."

American Beauty, Sam Mendes. EE.UU., 1999

sábado, 15 de marzo de 2008

Tarde (Sin daños a terceros)

Justamente ahora irrumpes en mi vida, con tu cuerpo exacto y ojos de asesina. Tarde como siempre nos llega la fortuna. Tú ibas con él. Yo iba con ella, jugando a ser felices por desesperados, por no aguardar el tiempo, por miedo a quedar solos. Pero llegamos tarde, te vi y me viste, nos reconocimos enseguida, pero tarde. Maldita sea la hora que encontré lo que soñé, ¡tarde!

Tanto soñarte y extrañarte sin tenerte, tanto inventarte, tanto buscarte por las calle como un loco, sin encontrarte. Y ahí va uno de tonto, por desesperado, confundiendo amor con compañía. Y ese miedo idiota de verte viejo y sin pareja, te hace escoger con la cabeza lo que es del corazón. Y no tengo nada contra ellos, la rabia es contra el tiempo por ponerme junto a ti, ¡tarde!

Ganas de huir, de no verte ni la sombra, de pensar que esto fue un sueño o una pesadilla, que nunca apareciste, que nunca has existido. Ganas de tocarte, ganas de rozarte, de acercarme a ti, y amarrarte en un abrazo, de mirarte a los ojos y decirte ¡bienvenida! Pero llegamos tarde, te vi y me viste, nos reconocimos enseguida, pero tarde: Quizás en otras vidas, quizás en otras muertes.

Qué ganas de tocarte, qué ganas de rozarte, de acercarme a ti y golpearte con un beso, de fugarnos para siempre, sin daños a terceros.

Ricardo Arjona

viernes, 14 de marzo de 2008

"Una casa no es un hogar"




Ella Fitzgerald canta A House Is Not a Home. Montreux 1969

Una silla es una silla
incluso aunque no haya nadie sentado
pero una silla no es una casa
y una casa no es un hogar
cuando no hay nadie para abrazarte fuerte
ni para que le des un beso de buenas noches.

Una habitación es una habitación
incluso aunque esté en penumbra
pero una habitación no hace una casa
y una casa no es un hogar
cuando los dos estamos separados
y uno de nosotros tiene el corazón roto.

Entonces y ahora te llamo
y de repente tu cara aparece
pero es un pasatiempo sin sentido
cuando termina en lágrimas.

Cariño, ten corazón
no dejes que un error nos aparte
no dije en serio lo de vivir solo
convierte esta casa en un hogar
cuando suba las escaleras y gire la llave
por favor, estate ahí todavía enamorado de mí.

Es fantástico tener un hombre en casa
no dije en serio lo de vivir solo
convierte esta casa en un hogar
cuando suba las escaleras y gire la llave
por favor, estate ahí todavía enamorado de mí.

(La traducción -libre- es de Un Observador Inquieto. Gracias a Manuel, su autor.)

jueves, 13 de marzo de 2008

Del Fantasma del Amor

Cae la noche, sube la bruma
y en el sendero que conduce a la luna
se ve salir, como todas las noches,
al Amor.
Lleva a cuestas su tedio milenario,
las cadenas coloniales alrededor del cuello,
-¿por qué será que el Amor,
como todos los fantasmas,
arrastra cadenas, son su estigma,
son el marcador que sella su clase?-
vaga incansablemente por su ruta,
recrea recuerdos para distraerse,
campea sobre sus dominios,
cada cierto tiempo se reporta
mascullando un aullido
emitiendo luces como una vulgar luciérnaga
escupiendo sobre el compromiso
que le negó el derecho al descanso eterno
pisoteando la avaricia que sin atenuantes
lo condenó a ser un eterno enamorado y noctámbulo.
Durante siglos se ha pellizcado
para saber si sueña
o para saber si su deambular
es solo producto de una broma de mal gusto.
¡Pero no!
Está mortalmente despierto
las caricias y los besos no fueron suficientes
no ha conseguido quien se enamore de él
en realidad casi todos le han utilizado
sólo algunos lo sienten de verdad,
sólo ellos se inquietan ante su etérea presencia.
Se le niega el elemental derecho a ser reconocido.
Está tan lejos de todo
que ya no aspira a que sus deseos sean ocultados.
Sufre ante la evidencia de ser mediocre
aun después de ser descubierto
No se siente ni siquiera un buen fantasma...
No ha logrado llenar del todo a alguien
muy pocos le han fabricado una leyenda;
sobre él se han escrito algunas crónicas
y muchísimos intentos de poemas
tratando de reivindicar a un aspecto proletario
condenado irremediable e intemporalmente
a los terribles flagelos
de la soledad y el aburrimiento...
hasta que un día surja una nueva oportunidad
de visitar uno, dos u otro corazón más
con la esperanza, la certeza
de no salir de allí
jamás.
Mario Andrés Alzate
(escrito en 1997, como un ejercicio de mi clase de Técnicas de Comunicación. Mario, además, es el modelo de la fotografìa).

miércoles, 12 de marzo de 2008

Simetría y Sincronismo

A propósito del comentario de Tenmempié, sobre la película Valentín, recordé apartes de Inshallah, uno de los magníficos libros de la fallecida periodista italiana Oriana Fallaci.



" ...la necesidad de amar es una necesidad que hay que satisfacer en pareja pero ... su cantidad o calidad casi nunca está equilibrada, en los dos, por simetría y sincronismo: cuando está disponible él, no está disponible ella; cuando está disponible ella, no está disponible él... O bien están disponibles los dos pero para satisfacer la necesidad de él basta con un sorbo, para satisfacer la necesidad de ella no basta un río y viceversa. En mi opinión, el anatema que Dios lanzó contra Adán y Eva al expulsarlos del Paraíso Terrenal no fue tú-parirás-con-dolor, tú-te-ganarás-el-pan-con-el-sudor-de-tu-frente. Fue: cuando-él-te-quiera, tú-no-le-querrás; cuando-ella-te-quiera, tú-no-la-querrás."
" ...del mismo modo que no se puede amar a un muerto eternamente, no se puede amar eternamente a quien no nos ama."

martes, 11 de marzo de 2008

Mi cielo, ¿me haces un favor?


-¿Me haces un favor?
-¿Qué clase de favor?
-¿Quieres tenerme mis avioncitos durante todo el recreo?
-¿Durante todo el recreo?
-Sí, es que tú eres mi cielo


¿Qué es un beso?

Un beso, pero al fin de cuentas, ¿qué es? Un sermón hecho un poco más cerca, una promesa, más precisa, una confesión que quiere confirmarse; es un secreto que toma la boca por oreja, un instante de infinito que hace un ruido de abeja, una comunión que tiene un gusto de flor, una manera, un poco, de respirar el corazón. Y un poco, también, de degustarse en el borde de los labios ¡el alma!
Rostand. Cyrano de Bergerac.

lunes, 10 de marzo de 2008

Palabras para Julia

Al visitar a los amigos blogueros, me encontré con las Palabras para Julia, de José Agustín Goytisolo, en el Rincón del Desvarío. Siempre vienen bien las palabras de aliento. Siempre viene bien la esperanza. Siempre viene bien compartirlas, esta vez con mis asiduos y con los nuevos por estos lares de Lo que (se) me ocurre.

(Gracias, Juan, por la dedicatoria.)


Tú no puedes volver atrás
porque la vida ya te empuja
como un aullido interminable.

Hija mía es mejor vivir
con la alegría de los hombres
que llorar ante el muro ciego.

Te sentirás acorralada
te sentirás perdida o sola
tal vez querrás no haber nacido.

Yo sé muy bien que te dirán
que la vida no tiene objeto
que es un asunto desgraciado.

Entonces siempre acuérdate
de lo que un día yo escribí
pensando en ti como ahora pienso.

La vida es bella, ya verás
como a pesar de los pesares
tendrás amigos, tendrás amor.

Un hombre solo, una mujer
así tomados, de uno en uno
son como polvo, no son nada.

Pero yo cuando te hablo a ti
cuando te escribo estas palabras
pienso también en otra gente.

Tu destino está en los demás
tu futuro es tu propia vida
tu dignidad es la de todos.

Otros esperan que resistas
que les ayude tu alegría
tu canción entre sus canciones.

Entonces siempre acuérdate
de lo que un día yo escribí
pensando en ti como ahora pienso.

Nunca te entregues ni te apartes
junto al camino, nunca digas
no puedo más y aquí me quedo.

La vida es bella, tú verás
como a pesar de los pesares
tendrás amor, tendrás amigos.

Por lo demás no hay elección
y este mundo tal como es
será todo tu patrimonio.

Perdóname no sé decirte
nada más pero tú comprende
que yo aún estoy en el camino.

Y siempre siempre acuérdate
de lo que un día yo escribí
pensando en ti como ahora pienso.

domingo, 9 de marzo de 2008

Orgasmo democrático

Elecciones generales en España. Otra oportunidad de sentirme ciudadano de este país, ejerciendo el derecho al voto. No para orgasmo, como dice Pedro Zerolo un inmigrante de los que se han ganado un lugar destacado aquí. Pero sí es la ocasión de sentir que vivo en una nación donde se respetan más las libertades, la opinión y los derechos. Donde la gente tiene más oportunidades. Donde hay más presencia del Estado. No es el paraíso, falta mucho por recorrer. Pero que se vive mejor que en muchos otros lugares, donde dictadores, guerrilleros, paramilitares, mafiosos o ladrones de guante blanco, cierran la boca o las conciencias de sus coterráneos.

He votado en conciencia. Porque también soy de este país. Porque lo quiero mejor de lo que está y porque me duele el mal que le hacen algunos. Porque creo en la democracia. Porque soy libre. Porque puedo.

miércoles, 5 de marzo de 2008

A veces llegan cartas (5) (Segunda Parte)

Sin embargo, mis palabras no están dirigidas a "eso que llaman amor" porque, al ser su vivencia algo tan personal y porque a veces no creo en él, haría toda una apología falseada desde mi pequeño, exclusivo y subjetivo punto de vista. Yo quiero hablarte desde otra perspectiva. Cómo quisiera tener alas (o saberlas usar) para entrar por tu ventana (cuando la abras) y aposentarme allí unas horas. Cómo quisiera sentir lo que tú, vivir tus vacíos y ayudarte a limpiar los pegotes: Sé muy bien que sólo tú puedes hacerlo, pero que quisiera es que me dejes estar, así sea un poco, en esos espacios que siempre quedan.

La cuestión no es de juegos pirotécnicos ni de ambientes sórdidos. La cuestión es que "faltan besos que le devuelvan al hombre solitario su fe en los labios de otros". Es tan rico sentirte cerca, abandonado a lágrimas sin sollozos, a vibrar cada nota de una canción francesa, a disfrutar una noche de confesiones y de brindis con las manos porque las copas no sienten. Es tan cálido tu hablar sosegado, sin guardias altos ni bajos, abierto como los libros que se dejan releer y subrayar. Es tanta suerte saber que me has permitido hurgar en tu interior y sentir tu abrazo de cómplice, de camarada y soñador de ilusiones.


Es tan rico saber que estoy feliz porque llenamos una noche de dos -de nosotros dos-. Es tan rico saber que para ambos faltaron muchas horas de conversación y confidencias y que tenemos pendientes más encuentros, festivos como la bienvenida de tu aparecer por esta tierra celeste, verde e insulsa.

Ante ti tienes la posibilidad de seguir viviendo, pero no vivir a secas, sino con intensidad cada aparición de las personas en tu vida. Fíjate que por cada uno de los que nos hacen más vulnerables aparecen al menos dos que nos reconcilian con la humanidad. De tanto en tanto sufrimos, pero no podemos dejar que las lágrimas nos impidan ver el horizonte sino que nos aclaren la mirada.

Ya alguna vez te lo dije: Naciste para jugar en las ligas mayores. Y eso no significa ocupar el cargo más alto ni tener el más disputado de los títulos. Significa valor, ser algo para alguien, valer para ti mismo, querer lo que haces y a quien tienes al lado. No soy el más fuerte de los seres humanos, también flaqueo a veces, lloro -y lo sabes- y siento como el que más, pero,

Por si acaso...
estoy preparando mis manos.
Por si acaso...
estoy preparando mis brazos.
Por si acaso...
estoy preparando este beso.
Por si acaso...
estoy preparando el regreso...


Escrita en Medellín, Colombia, el 9 de julio de 1993

martes, 4 de marzo de 2008

A veces llegan cartas (5) (Primera Parte)

Sólo quiero decirte
que si de algo sirve...
estoy contigo;
lo suficientemente lejos
para que puedas
conservar tu mundo
y lo suficientemente cerca
para poder quererte.



No hay que ser mago, ni sacar un esotérico tarot amarillo de la solapa para conocer la cálida y vulnerable superficie de tu alma. Bastan tus gestos cotidianos, dos o tres palabras que asoman bajo ellas mismas, para entender que a veces sientes miedo, un miedo de los que sobrecogen el alma. A un buen observador tú le dices cuándo necesitas un tibio abrazo al corazón, un aliento para tu marcha, una explicación al espacio que no puedes llenar ni mantener limpio del todo.

La Cábala, el Tarot, las Runas... el Psicoanálisis... yo... diremos lo mismo: Abre las ventanas, mira cómo las cortinas quieren volar a los cerros de tu ciudad; los rayos del sol te dejarán ver las partículas de polvo que flotan en tu espacio; el aire enrarecido se llenará de un oxígeno nuevo que lo purificará; el transeúnte que por azar cruza tu calle se sorprenderá por una música que le regalas y no puede poseer porque tampoco es tuya.

Barre esa habitación a la que ahora entra luz. Ahuyenta las malas energías, los espíritus burlones que empequeñecen el espacio e impiden resonar las melodías; descubre el color de ese viejo grabado; voltea el colchón y ahoga el insomnio de todas las noches sin esperanza; cambia de lugar esos preciados objetos y guarda algunos otros.

Sentirás un ligero cansancio tras la lucha con cada recuerdo; cualquier astilla puyará tu piel o hará sangrar tu dedos... (pero la astilla sale con una aguja y la sangre estanca presionando la piel un poco).

Date un buen baño. Aplícate la mejor de tus lociones. Túmbate en el suelo (donde ahora no hay pegotes). Pon una música suave y recorre con tus ojos cada rincón. Reconoce esas nuevas formas que te acompañarán cada vez que pises el umbral. Ellas siempre estarán ahí a menos que las cambies de sitio o las arrojes a la calle (por la ventana que sólo cerrarás para dormir, para ausentarte). Y cuando no haya luz, aquellos terribles fantasmas no podrán acceder a la oscuridad porque en medio pondrás un mundo de velas encendidas que iluminan la vida al perseguir estrellas, cometas y esperanzas.

¿Qué quieres tú? ¿Un Amor loco? ¿El amour fou, daliniano, surrealista y fuera de todo control? ¿Quieres promesas, pactos y compromisos? ¿Quieres llenar vacíos de presencias, llenar esas ausencias con una simple mirada, un gesto, un beso fugaz? ¿Quieres explicarte lo-no-dicho, lo interpretado sin tener un código o una clave?

¿Tenemos nosotros la explicación tangible de lo intangible? ¿Quién sabe lo que es el amor? ¿Shakespeare, Virgilio, Yourcenar, los poetas, los críticos, los pensadores, los carteles publicitarios, los que hacen el amor? ¿Tú? ¿Yo?
Esa palabra con la que todos juegan ha soportado todas las definiciones, todas las clasificaciones ("hay amores que nos llevan al abismo y hay amores de los buenos como tú"), todas las categorías. Hay quienes dicen que se aja, se gasta y se estropea; hay quienes predican que cuando uno lo tiene puede hacer lo que quiera. Pero, ¿puede alguien comunicar su esencia y retenerla? Para mí es algo superior, así como una melodía que nos llena, nos excita y no podemos retener más que en el pensamiento.


(Continuará)

lunes, 3 de marzo de 2008

Cosa simples



Las manos de un niño y la arena de la playa. Cuánta simpleza. La de un paseo frente al mar en un día soleado y fresco de invierno. Ojalá pudiésemos ver el mundo con los ojos de un niño feliz arrastrando un palo sobre la arena, dibujando un sol en ella.

A mi me estampó un sol en el lado oscuro de mis días grises. Aires renovados para volver a casa, después de mirar sus inocentes ojos brillando con su sonrisa. Un niño afortunado de tener la familia que le tocó en suerte. Yo, un adulto afortunado de tenerlos al lado en el camino.