domingo, 28 de diciembre de 2008

A veces llegan cartas (10): Vivir con miedo es como vivir a medias

Acabo de recibir, "desde la puta mierda", este mail de Javi, un entrañable amigo. Él emigró dos años antes que yo, a los Estados Unidos. Y también ha vivido lo suyo. Quisiera tener su coraje, empacarlo todo y comenzar de nuevo en otro lugar. Y como estoy de acuerdo con él en cuanto a estas cosas del año nuevo y los propósitos que se olvidan en la segunda quincena de enero, publico su carta porque me ha dejado sin palabras. No tendría más que agregar... (¿o sí?) Ya veremos. A lo mejor escribo mis propias impresiones de este año y solo me hago una promesa: No me haré promesas.



Hace unos días me ha escrito mi amiga María y me ha preguntado cuando es que voy a escribir ‘eso que siempre escribo’ a fin de año. Y no me había fijado que no había pensado en nada. Y es que he estado enviando estos correos a mis amigos desde hace mucho tiempo (¿diez años?) Siempre tratando de contarles de mi obra y milagros y de todo lo que me pasa, tratando, tal vez inconscientemente de mantener un vínculo con esa vida que deje hace diez años, cuando todo cambió.


Diez años. Parece mucho y parece poco, pero no deja de parecerme. Algunas veces todo este tiempo pesa como el cemento y algunas veces es tan ligero que no lo siento. Pero siempre está presente. Porque no único que no cambia es el tiempo, que sigue corriendo ¿no? Y este puede probar ser un año decisivo. Decisivo a muchos y varios niveles. Inclusive más decisivo que cuando me vi en Pittstburgh con cien dólares a mi nombre. Mucho más decisivo que cuando me vine a Ohio. Mucho, mucho más decisivo. Y eso de alguna manera asusta.


Estos 365 días me han demostrado que me puedo desesperar como un experto y que me puedo recuperar con facilidad. Estos 365 días me han mostrado mis miedos y terrores y algunos de ellos me han mirado a la cara. Uno ya lo ha hecho: mi trabajo –que me causaba tantos sinsabores y ansiedades- ha terminado. Por obra y gracia de la maledicencia de algunos y la ira disfuncional de otros. Y no tengo otro en la mira. Nada. No tengo nada ‘en remojo’ como dicen por ahí. Y también me mudo, ve voy a Chicago, otra ciudad grande, donde todo el mundo me dice que hay algo para todos. Espero que sí, porque estoy viviendo de padrenuestros prestados y eso no dura.


Y voy a dejar pedacitos de mi corazón regados por todas partes. Porque eso es parte del trabajo, de esto que llamamos vida, de eso que llaman destino. Porque va a ser hora de replanear, de empezar otra vez, de dejarlo todo –o casi todo- atrás otra vez. Pero ya lo he hecho, ¿no? No va a ser nada nuevo. Claro que era más joven. Ahora tengo –se supone- más experiencia y debo tomar mejores decisiones. Después de todo, este tiempo no ha pasado en vano.


De manera que no tengo planes de Año Nuevo. Nada de listas y de promesas fútiles que tal vez no cumpla. Porque todo eso cae como un castillo de naipes al menor estremecimiento del destino. Porque nada es seguro. Y porque me he dado cuenta que todo pasa por una razón. Nada sucede en el vacío. Las alas de una mariposa pueden cambiar el curso del mundo, o sea que ¿por qué no el de una vida? Lo que me parecía ‘malo’ en un momento dado puede que no sea tan malo. Y lo ‘bueno’ puede que no sea tan bueno. ¿quién sabe? De manera que por lo pronto me mudo a Chicago, busco un trabajo, veo que pasa. Lo único que es constante es el cambio. O sea que ¿para que tener miedo? No vale la pena. No vale la pena apegarse a las cosas que tenemos, porque esas siempre se pueden volver a conseguir. Ni a los sitios que frecuentamos, porque pueden cambiar. No vale la pena vivir con miedo. Porque eso no es vida.


O sea, que nada de listas, de promesas, de metas que tal vez no se cumplan. Solamente la idea de que lo que venga va a ser bueno de una u otra manera.


Feliz Año. Y eso se puede interpretar de cualquier manera. Porque lo único que es seguro es que todo va a cambiar.


Besos.


Javi

sábado, 27 de diciembre de 2008

¡Me calaste hondo!

Esta canción, Infinito, me llegó profundamente. La escuché por primera vez en el especial de Navidad de Televisión Española, interpretada por Raphael en la celebración de sus 50 años de vida artística. Le acompañó su autor, Bunbury, el cantante aragonés y miembro de la famosa banda Héroes del Silencio. ¡Qué hermosa letra y cuánto sentimiento!

Queriéndonos infinito,

pensaban siempre será igual

¿Cómo lo permitimos?

¿Qué es lo que hicimos tan mal?

Fue este orgullo desgraciado

que no supimos tratar.

Engáñame un poco al menos,

di que me quieres aún más,

que durante todo este tiempo

lo has pasado fatal,

que ninguno de esos idiotas

te supieron hacer reír

y que el único que te importa

es este pobre infeliz.

¡Me calaste hondo

y ahora me dueles!

...

Sólo quiero que una pena

se llore frente a mi ataúd:

que esta herida en mi alma

no llegó a cicatrizar

y estará desesperada

hasta que te vea llegar.

jueves, 25 de diciembre de 2008

Tras las huellas de los Reyes Magos

Por Massimo Oldoni
Profesor de Literatura Medieval
Universidad de Salerno (Italia)
Traducción de Humberto Barrera Orrego

Cuando sobre el Monte Vaus, el día del nacimiento de Jesús, se vio remontarse una estrella más resplandeciente que el sol, los tres Reyes Magos se pusieron en marcha por rutas distintas: aquella fue la primera peregrinación de la historia cristiana. En el centro de la estrella se distinguía la imagen de un niño debajo de una cruz; desde dentro del astro se oía una voz: "Hoy ha nacido el Rey de los judíos, aquel que es la esperanza y el Señor de los gentiles. ¡Id a buscarlo y adorarlo!" El Monte Vaus se identifica con el Sabalán, la cima más alta del Azerbaidján, en el noroccidente de Persia. La tradición latina medieval llama al Vaus "Monte de la Victoria" y fue sin duda una victoria aquel encuentro de reyes y pastores, de desposeídos y potentados, que en el camino de Belén descubrieron que eran iguales.

Partió Melchor, rey de Nubia y Arabia. De los tres era el de estatura más baja, no tenía esposa ni concubina y permaneció virgen toda la vida. De los reinos de Godolia y Saba partió Baltazar, de estatura mediana, también virgen de por vida. Por último partió Gaspar, el más alto de los Reyes Magos, de piel oscura como los etíopes, virgen también y carente de reina o concubina, era rey de Tarsis y Egriseula, la isla donde crece la mirra en forma de espigas tostadas por el sol. Los tres Reyes Magos, salidos de sus reinos, iban en pos de la estrella que avanzaba al par que aquellos y su séquito, y se detenía cuando ellos lo hacían.

Siguiendo caminos diferentes, los Reyes Magos atravesaron aldeas y ciudades. Era un tiempo de paz y la gente no cerraba las puertas de sus casas. Los veían acercarse en medio de una claridad casi diurna, y todos quedaban asombrados de la imponencia del cortejo. Los caminos ignorados, las corrientes de agua, los desiertos, los pantanos, las montañas, todo se trasformaba a su paso en carreteras allanadas. Y en la encrucijada del Monte Calvario, a dos millas de Jerusalén, los Reyes Magos vieron unos a otros al desvanecerse la niebla que se había levantado.

Hablaban lenguas distintas, venían de países remotos, pero se entendieron y comprendieron que tenían la misma meta. Al despuntar el día buscaron al Niño: "¿Dónde está el Rey de los judíos?". Se dieron la vuelta y, siguiendo la estrella, llegaron a Belén sin necesidad de alimento o bebida y sin darles forraje a los animales. Allí, los Reyes Magos se encontraron con los pastores, la primicia de los judíos, y conocieron a otros reyes, la primicia de los gentiles. Para todos llevaban los Reyes Magos dones provenientes del Palacio de Salomón y de su templo, dones que habían pertenecido alguna vez a Alejandro de Macedonia y a la reina de Saba: vasos preciosos, oro, plata, pedrería. Entraron a Belén hacia la hora sexta, es decir, a mediodía. el viaje había durado trece jornadas. La estrella se había detenido sobre un tugurio e iluminaba la cueva que servía de establo a los animales. Y allí estaba Jesús, un rollizo recién nacido de trece días, en brazos de su madre. María, florida de cuerpo y de piel morena y pelo negro estaba tocada con un paño de lino. En cuanto vio a los reyes Magos se cubrió con un manto blanco.

Los Reyes Magos, apeados de sus dromedarios, besaron la tierra trémulos de emoción, sintiéndose invadidos de un ansia ferviente, y de todo cuanto habían llevado cogieron al azar lo que encontraron al alcance de la mano; pero como reyes de la India, Persia y Caldea, supieron así mismo ofrecer dones especiales al rey de los judíos. Melchor ofreció el oro, símbolo del tributo y signo de la divina majestad y realeza; Baltazar ofreció incienso, símbolo del sacrificio y signo del poder divino; Gaspar ofreció la mirra, símbolo del entierro de los muertos y signo de la fragilidad humana. Pero el don de Melchor, el oro, aludía a historias remotas...

Melchor regaló a Jesús una manzana de oro y treinta denarios del mismo metal. La manzana había pertenecido a Alejandro Magno. La habían fundido con pequeñas contribuciones provenientes de todas las provincias del Imperio, y Alejandro la sostenía en una mano como el mundo del cual era señor, pero cuando había salido de Persia, la manzana había quedado allá. Aquel globo precioso representaba en su esfericidad sin principio ni fin el poder de aquel que gobierna el universo con su virtud y su unidad extraordinaria. En cuanto el Niño Jesús sostuvo entre sus manos la esfera, ésta se desintegró reduciéndose a un puñado de polvo de oro que parecía esparcirse por todas partes, para sgnificar que la humildad de Jesús y la irrepetible unidad de su presencia harían pedazos las cosas viejas del mundo. Los treinta denarios de oro que Melchor ofreció al Señor eran los mismos que Abraham había llevado consigo de Ur de Caldea a Hebrón, y con ellos había comprado el terreno para su sepulcro, el de su mujer y los de sus hijos. Teraj, padre de Abraham, los había mandado a acuñar para el rey de Mesopotamia, y por aquellos mismos denarios José fue vendido por sus hermanos a los ismaelitas. Muerto Jacob, los treinta denarios fueron enviados a la reina de Saba para comprar los aromas con que fueron embalsamados Jacob y José, y después fueron depositados en el tesoro real. En tiempos de Salomón, la reina de Saba los donó al Templo de Jesuralén. Cuando los árabes conquistaron a Jerusalén, en tiempos de Roboam, los denarios de oro fueron guardados en el tesoro del rey de los árabes. Melchor los tomó de allí. Pero, durante la huída a Egipto, María perdió los treinta denarios que, junto con los otros dones ofrecidos por los tres Reyes Magos, había envuelto en un paño de lino. Un pastor beduino los encontró y, como estaba atormentado por un mal incurable, fue a Jerusalén, donde Jesús lo curó y lo convirtió. El pastor le ofreció el envoltorio con los preciosos dones y Jesús ordenó que todo fuera depositado en el Templo. Allí el sacerdote quemó el incienso de Baltazar sobre el altar e hizo guardar en la estancia del tesoro los treinta denarios junto a la mirra. Tres días antes de la pasión del Señor, los príncipes de los sacerdotes tomaron los treinta denarios del tesoro del Templo y de los dieron a Judas en recompensa por traicionar a Jesús. De la mirra, se sabe que una parte fue mezclada con el vinagre que se le ofreció a Jesús en la cruz, y otra parte la agregó Nicodemo a otros aromas para embalsamar el cuerpo del Rey de los judíos.

Una vez que hubieron presentado sus dones y adorado a Jesús, los Reyes Magos volvieron a su tierra, pero ya no estaba la estrella para guiarlos: habían bastado trece días para llegar a Belén, pero hicieron falta dos años, guías e intérpretes para hacer el camino de vuela a sus reinos. Herodes hizo quemar sus naves y trastornó en su búsqueda las provincias que atravesaban.

Pasó el tiempo... Los Reyes Magos conocieron por las narraciones que circulaban todos los hechos de la vida de Jesús, sus obras, sus milagros, su predicación. El apóstol Tomás los encontró todavía sanos y ancianos cuando fueron a buscarlo con todo su pueblo para hacerse bautizar. Los reyes Magos, entonces, difundieron la palabra de Cristo. En compañía del apóstol Tomás consagraron en el Monte Vaus una capilla al Rey de los judíos, y decidieron encontrarse allí cada año. Al pie de la montaña los Magos hicieron edificar una ciudad, Saba, la más noble y rica de la India y de todo el Oriente, al sudoeste de Teherán y al Noroeste de Qom. Allín, en Saba, estaba la morada del Preste Juan, señor de los hindúes, pastor de gentiles convertidos que había heredado su nombre de Juan el Bautista y de Juan el Evangelista. Por último, el apóstol Tomás consagró arzobispos a los Reyes Magos y ellos, a su vez, ordenaron obispos y sacerdotes en toda la India, país donde vivieron largamente.

jueves, 18 de diciembre de 2008

Tres mil besos tarde




Como en la literatura, en el cine o en el teatro, en la música nos encontramos tantas veces con historias parecidas a las propias o a las de quienes conocemos que nos sentimos identificados con ciertas canciones o géneros. Hay lo que llamo Canciones de Amor y Desamor. Aquellas que cantan los boleros, los tangos, las baladas o la copla, este género tan español, tan andaluz, tan desgarrado, tan exagerado y a la vez tan popular.

Hoy me regalaron esta canción -espero que no lo hayan hecho con la intención de dedicármela- y se me clavó en la cabeza todo el día. Me gustó por la intérprete, que es un portento de voz. Pero especialmente por la letra, porque es una verdadera pasión amorosa. Y me gustó porque me recuerda que muchas veces llegamos tres mil besos tarde (o tres mil besos temprano) al corazón de algunas personas. Y que en otras ocasiones creemos que llegamos a tiempo; pero no, a pesar de que te reciban y te den unos cuantos besos, algo te dice que al otro (o a la otra) aun le faltan unos miles por repartir por ahí. O alguien te da un par de aquellos inolvidables, sorpresivos y desde lo profundo del alma y tienes que esperar años y cientos de besos mas por ambas partes para volverse a encontrar. Quizás no haya necesidad de romperlo todo. A lo mejor basta esperar: El mundo es pequeño y este planeta redondo gira y en su trayecto las emociones y los amores de verdad se vuelven a encontrar. Si son de verdad, insisto.

Y claro, por supuesto que hay algunos que es mejor enterrar o incinerar porque, como dice la canción, llegan demasiado tarde, cuando ya no hay lugar para ellos (porque ese lugar está felizmente ocupado o felizmente solo). Y lo mejor es pedirles que se marchen y que no vuelvan a llamar a la puerta. Para esos, mejor un adiós sin despedidas ni tristes velatorios por lo que no puede o no debe ser...

miércoles, 17 de diciembre de 2008

¡Macondo existe!

Muchas veces he oído que Gabriel García Márquez no ha inventado nada. Que sólo se limita a contar la realidad, adobada con el llamado Realismo Mágico, de un país llamado Colombia y que él bautizó como Macondo. Hace ocho años vivo en España y había olvidado como funcionan las cosas en la tierra de los habitantes de Cien Años de Soledad. Pero lo reviví este lunes en el consulado de Colombia en Barcelona.

Acudí puntual a la cita, previamente obtenida por internet (cosas reales de la vida moderna). Me encontraba rodeado de colombianos, en territorio colombiano (según el Derecho Internacional), atendido por bogotanos muy amables, en un lugar impecable y cómodo. Se trataba de presentar la documentación para solicitar la nueva cédula de ciudadanía que reemplazará a la antigua a partir del 1 de enero de 2010. Tres fotos, original y fotocopias de la cédula actual (en la que aun tenía pelo y me firmaba como un chiquillo), formulario debidamente diligenciado y poco menos de media hora de espera para poner las huellas dactilares y firmar. Hasta aquí todo normal, muy moderno, muy internacional. Pocos minutos después de estos trámites, sale la amable funcionaria a entregarme el resguardo de la solicitud y me pide que no plastifique el documento y que al cabo de DOS AÑOS aproximadamente consulte por internet (otra vez la modernidad) si ya ha sido expedida.

Recuerdo cuánto se tarda en España solicitar y recibir un certificado de antecedentes penales y de policía: ¡5 minutos! Y también cuánto tardé en tramitar el DNI (Documento Nacional de Identidad) y el pasaporte español, una vez obtenida la doble nacionalidad: ¡10 minutos!

Cómo no creer que Remedios la Bella, uno de los personajes de Cien Años de Soledad, "transparentada por una palidez intensa, ascendía al cielo entre el deslumbrante aleteo de las sábanas que subían con ella, que abandonaban con ella el aire de los escarabajos y las dalias, y pasaban con ella a través del aire donde terminaban las cuatro de la tarde, y se perdieron con ella para siempre en los altos aires donde no podían alcanzarla ni los más altos pájaros de la memoria."

miércoles, 10 de diciembre de 2008

Día Internacional de los Derechos Humanos



¡Aviva la llama!

Contra la injusticia.

Por los que no tienen alimentos, salud, educación, agua, medicinas.

Por los perseguidos.

Por los secuestrados.

Por los asesinados.

Por los pueblos masacrados.

Por lo que no tienen derecho a expresar sus ideas, sus sentimientos, sus emociones ni su sexualidad.

Contra la tortura.

Contra la dictaduras políticas.

Contra el chantaje emocional y económico.

Contra la explotación sexual y laboral.

Contra los maltratadores y maltratadoras.

Contra los pederastas.

Contra los xenófobos.

A favor de los que no tienen voz.

...

lunes, 8 de diciembre de 2008

No regret


Director: Lee SongHee-I
Protagonistas: Lee Young-Hun, Lee Han, Kim Dong-Wuk
País: Corea
Año: 2006

No regret cuenta la historia de Su-min (Lee Young-Hun), un joven huérfano que abandona su pueblo para irse a Seúl a labrarse un futuro. Compagina sus estudios con dos trabajos, en una fábrica de día y chófer privado de noche. Su-min no tiene problemas en admitir que es gay, pero cuando uno de sus clientes (que resulta ser el hijo del dueño de la fábrica donde trabaja) se le insinúa, decide dejar sus dos trabajos. Su-min termina trabajando en un bar gay dedicándose a la prostitución.

El romance entre estos dos es complicado, tormentoso y dramático... Jae-Min hace todo lo que puede y más para conseguir que Su-Min le acepte. Su-Min le rechaza una y otra vez, y otra, y otra, pese a que cada vez lo desea más, sin saber que Jae-Min tiene sus propios problemas con su familia, y que a veces el estar enamorado el uno del otro no es suficiente.
Entran aquí los prejuicios sociales, la presión familiar, las apariencias... la sinceridad, la toma de decisiones radicales, el enfrentarse a uno mismo, a los demás, al mundo entero si es preciso. Gira aquí el tiovivo que nos pone unas veces arriba y otras abajo, en un caballito que esta vez no es una atracción de feria sino la Vida misma. Un caballito que nos deja mirar cómo se mueren los amigos y tenemos que llevar sus cenizas por una carretera, de vuelta a donde salieron (esta es quizás la mejor escena de la película). Un caballito que nos enfrenta a los verdaderos sentimientos, los que siguen ahí aunque queramos reprimirlos y negarlos.


Linda película. No para palomitas. O sí. Para sofá, mantita y caja de kleenex (si el espectador es lloricas o está sensible). Para ver solo. O acompañado. Aunque sea de recuerdos.

domingo, 7 de diciembre de 2008

Otra Noche de Alumbrados... ¡pero lejos!

Otro 7 de diciembre. Otro día en que no se me aparta de la mente la Noche de los Alumbrados, en la que desde que tengo memoria se encienden velas en las puertas y ventanas de las casas colombianas y se da comienzo "oficial" a la temporada de Navidad con el encendido de los "alumbrados" de muchas ciudades. Popularmente la noche del 7 de diciembre es celebrada con especial fervor porque la gente dice que pasa la Virgen de la Inmaculada Concepción y se trata de iluminarle el camino para que entre a cada casa y bendiga los hogares.
Pero más allá del contenido teológico, resulta evidente que la noche de las velitas es un espectáculo maravilloso porque la oscuridad del firmamento se rompe con los alumbrados de campos, pueblos y ciudades. Para mí es un recuerdo inolvidable la ciudad llena de luces simples como las de una vela, iluminando el rostro de los niños correteando de portal en portal; adultos como mi madre que guarda desde siempre una tabla de un metro y medio para pegar con su propia cera las velas de colores y evitar que le manchen el dintel de la puerta; aquellos viejos faroles de papel que colgaba del balcón de nuestra vieja casa del barrio de San Benito y que aguantaron años y años el viento de aquella esquina; las noches de muchos 7 de diciembre en que salía de prisa a ver el Desfile de Mitos y Leyendas por las calles del centro a encontrarme con los amigos; el comienzo del diciembre de Medellín, que se llena de gente, de olores a comida, de risas, de pitos, de luces, de caras alegres, de palabras desprevenidas con el transeúnte desconocido, de los comentarios siempre repetidos: "Este año los alumbrados están más lindos que siempre".


El Día o Noche de las Velitas se celebra en toda Colombia pero sus tradiciones varían en cada región. En el municipio de Quimbaya, en el departamento de Quindío, se celebra cerrando las calles al tráfico, y se iluminan con velas, faros y linternas de papel en forma de animales, santos, y figuras del pesebre, las cuales llenan toda la ciudad de luz lo cual atrae a muchos turistas durante esta temporada. Otros eventos incluyen desfiles y fuegos artificiales.

En Bogotá, además de todas las decoraciones de Navidad y la celebración de las velitas, la ciudad planea actividades nocturnas para toda la familia, muchas de las ciclovías están abiertas, museos, tiendas, y centros comerciales tienen horarios extendidos y eventos con fuegos artificiales se muestran en todas partes.

En Barranquilla se celebra principalmente en los barrios populares. La gente saluda a la Virgen iluminando las terrazas de sus casas con faroles multicolores. Muchos barranquilleros esperan la llegada del 8 al son de la música porque marca la llegada de la Navidad. Muchos se quedan despiertos a que llegue el 8 y en la madrugada de ese día se iluminan las calles con velas, velones y faroles.

En Medellín, la celebración es el día 7 de diciembre, las velas y faroles iluminan las casas y calles. Al mismo tiempo se inauguran las luces de Navidad por toda la ciudad, pero principalmente en la Avenida del Río y la Avenida La Playa. En esta última se realiza el "Desfile de Danzas, Mitos y Leyendas" en donde grandes figuras se ponen en escena. El Mohán, La Llorona, El Cura Sin Cabeza, La Madremonte, el Patetarro, y muchos más, al ritmo de la música cobran vida por algunas horas, junto a los fuegos pirotécnicos que ofrece la alcaldía como regalo a la ciudad.
Lo que nos enorgullece es la decoración de la ciudad, millones de bombillas en árboles, avenidas, sobre el río Medellín, en los cerros que rodean la ciudad, en centros comerciales y edificios... Cada año tratando de superarse. Cada año, también, me llegan por correo electrónico las imágenes de la ciudad preparándose para la Navidad y no dejo de sentir la que llamamos "nostalgia campesina". Es otra Navidad lejos de casa... Quizás así se ama más la tiera que me parió.

lunes, 1 de diciembre de 2008

Positiva/MENTE


"La Vida es una Enfermedad Mortal, Sexualmente Transmisible"
(Natalia Solano)

En estos tiempos, en estos días, se habla de los millones de infectados por el virus del VIH, de los estudios que se realizan para conseguir una vacuna preventiva y curativa, de las estadísticas, de homosexuales, bisexuales, heterosexuales. Se habla de condones, transfusiones, mitos y leyendas. Pero poco se habla de la desinformación, de la falta de educación en estos temas, de los tabúes de esta pandemia: El Sexo y la Muerte. Tampoco se habla de que, mientras en unos países los enfermos agonizan sin acceso a la medicación que les garantizaría una vida normal, en otros sobran los recursos; es decir, no se habla de las desigualdades entre varios mundos que están en el mismo planeta.

Yo me acuerdo hoy de los amigos que he perdido, de los que luchan y sobreviven a la infección, de los que ayudan a otros, de los que han soportado discriminaciones, de los que se han tenido que tragar solos su diagnóstico, de los que saben que aún merecen la oportunidad de amar y de ser amados, de los abrazos y alegría contagiosa de otros tantos. Y de los que tienen el poder para echar una mano a todos aquellos a quienes se les niega hasta un litro de suero fisiológico.

Y también me acuerdo de aquellos que ignoran (o se hacen los que ignoran) que este síndrome sólo puede atacar a tres tipos de personas: Hombres, Mujeres y Niños.

Y, sobre todo, me acuerdo de los Positivos por la Vida: los que teniendo un diagnóstico positivo, siguen con su Vida con una actitud nueva, sabiendo lo que todos sabemos y pretendemos olvidar: Que la Vida es un ratico (como canta Juanes) y que hay que vivir cada día instante como si fuese el último.

domingo, 30 de noviembre de 2008

Paseo dominical


Tarde de finales de otoño. Frío tolerable. Cielo azul. A rastras salgo de casa, casi en contra de mi voluntad. La invitación de un excelente amigo puede ser una buena terapia. Y sí que lo es. Caminar despacio a orillas de mi amado río Ebro. Sentir los rayos del tímido sol de la víspera de diciembre. Escuchar el canto grabado de los pájaros... Conversaciones intrascendentes y otras no tanto...


El sonido de las hojas secas de los árboles sobre el pavimento. Mi árbol favorito movido sin cesar por el viento. Un hombre solo pescando a orillas del río. Niños y adultos aprendiendo a patinar...

Luego una comida casera hecha como siempre con mucho cariño, talento y sazón. Dos o tres copas de vino tinto. Música uruguaya y brasileña. Y sobre todo, repito, buena compañía, palabras fáciles, tranquilidad y sosiego. Aislado, protegido.

¿Para qué pedir más?

martes, 25 de noviembre de 2008

Amor para todos

Vídeo de la última campaña publicitaria de la compañía textil sueca Björn Borg. Me lo he encontrado en el blog Lo Imprescindible, de un entrañable amigo radicado en los Estados Unidos, quien comenta:

"Instances like this one, make me think about moving to another country instead of staying in the United States and witness the bigotry, ignorance and backward way of thinking of the christianist movement. True colors, indeed."

A mí me parece bastante agresivo, en el buen sentido de la palabra. Atrevido, además. Que podría causar escozor en algunos sectores. Pero me gusta que toque un tema de actualidad y que insista en que el Amor, las relaciones afectivas, deben ser para todos. Sin falsas excepciones. ¿Cómo sería el mundo moderno sin hipocresías, permitiendo la libre expresión de la personalidad, de los afectos y de la sexualidad, sin tenerlas en el armario?

lunes, 24 de noviembre de 2008

¡Tiene 25 años!

"Regálame tus besos, que queman, que queman..."

"...¡Qué importa lo que hicimos, si aunque me quieras, te olvidarás de mí..."

"¿Por qué se van los pequeños momentos, los días sin tiempo, las noches sin sueño, los miedos ingenuos, que a veces pudieron llegar a gustar? ¿Por qué se van las mejores palabras de amor, las mañanas, los dos en la cama sin pensar en nada...?

Carmen París. InCubando. 25 años.

miércoles, 19 de noviembre de 2008

¿Para qué la censura?

Este anuncio pertenece a una campaña de la MTV, que fue retirado de las pantallas televisivas tras un día de emisión. ¿Para qué la censura? ¿Con qué objetivo algunos pretenden tapar el sol con un dedo? El ataque suicida y homicida de las Torres Gemelas ha sido más que un atentado; ha sido una muestra de la sinrazón humana. Un acto del que no nos olvidaremos (eso espero). Pero, ¿cómo nos olvidamos de aquellos que no tienen acceso a medicamentos, a vivienda digna, a alimentos... que son muchos más? ¿Alguien puede ayudarme a comprenderlo?

martes, 18 de noviembre de 2008

Dilo Hoy

(Autor desconocido)
Había una vez un chico que nació enfermo. Una enfermedad que no tenía cura. Con 17 años podría morir en cualquier momento. Siempre vivió en su casa, bajo el cuidado de su madre. Ya estaba harto y decidió salir solo por una vez. Le pidió permiso a su madre y él aceptó.

Caminando por su calle vio muchas tiendas. Al pasar por una de música y ver el aparador, notó la presencia de una niña muy tierna de su edad. Fue amor a primera vista. Abrió la puerta y entró sin mirar nada que no fuera ella. Acercándose poco a poco, llegó al mostrador donde se encontraba ella.

Ella lo miró y le dijo sonriente: "¿Te puedo ayudar en algo?", mientras él pensaba que era la sonrisa más hermosa que había visto en toda su vida Sintió deseos de besarla en se mismo instante. Tartamudeando le dijo: "Sí, eeehhh, uuuhhh... me gustaría comprar un c.d.". Sin pensar, tomó el primero que vio y le dio el dinero. "¿Quieres que te lo envuelva?", preguntó la niña sonriendo de nuevo. Él respondió que sí, moviendo la cabeza; y ella fue al almacén para volver con el paquete envuelto y entregárselo. Él lo tomó y salió de la tienda. Se fue a su casa, y desde ese día en delante visitó la tienda todos los días para comprar un c.d. Siempre se los envolvía la niña para luego llevárselos a su casa y meterlos a su clóset.

Él era muy tímido para invitarla a salir y aunque trataba, no podía. Su mamá se enteró de esto e intentó animarlo a que se aventara, así que a siguiente día se armó de coraje y se dirigió a la tienda. Como todos los días compró otra vez un c.d. y, como siempre, ella se fue atrás para envolverlo. El tomó el c.d. y mientras ella no estaba viendo, rápidamente dejó su teléfono en el mostrador y salió corriendo de la tienda.

...riiiiinggg... Su mamá contestó:

"¿Bueno?". Era la niña que preguntaba por su hijo. La madre desconsolada comenzó a llorar mientras decía: "!Qué, no sabes?... ¡Murió ayer!". Hubo un silencio prolongado, excepto por los lamentos de su madre.

Más tarde, la mamá entró en el cuarto de su hijo para recordarlo. Ella decidió empezar pro ver su ropa, así que abrió su clóset. Para su sorpresa se topó con montones de c.d. envueltos. Ni uno estaba abierto. Le causó curiosidad ver tantos y no se resistió. Tomó uno y se sentó sobre la cama para verlo; al hacer esto, un pequeño pedazo de papel salió de la cajita plástica. La mamá lo recogió para leerlo y decía: "¡Hola!, estás super guapo. ¿Quieres salir conmigo? T.Q.M., Sofía." De tanta emoción, la madre abrió otro y otros pedazos de papel en varios c.d. y estos decían lo mismo...


Moraleja: Así es la vida. No esperes demasiado para decirle a ese alguien especial lo que sientes. Díselo hoy. Mañana puede ser muy tarde.

*** *** *** *** *** *** *** ***
¿Ahora entendéis por qué no me corto en decir a quienes quiero que los quiero, aunque ya lo sepan?

lunes, 17 de noviembre de 2008

Amor Idiota

Los idiotas sólo tenemos
Fe, Esperanza y Caridad.
Y un poco de Amor.
Porque es gratis.

Frase final de "Amor Idiota", película de Ventura Pons, 2005.

Suele suceder


Luego de algunos años

de no verlo,

de nuevo nos encontramos.

No el deseo, como antes,

sino la nostalgia

de aquellos días de deseo

nos llevó a la cama.

La alegría de entonces

fue ternura y el goce

y la voluptuosidad

sólo complacencia.

Ambos, podría jurarlo,

tuvimos la certeza

de habernos sobrevivido.



Tengo Miedo. Poesía 1976-1982

domingo, 16 de noviembre de 2008

Juegos Prohibidos

Por cortesía de Tenmempié, me permito transcribir aqui la letra de la canción Juegos Prohibidos, interpretada por Miriam Makeba, cantante africana conocida como Mamá Africa, recientemente fallecida.

Though it's forbidden for my arms to hold you
And though it's forbidden, my tears must have told you
That I hold you secretly each time we meet
In these forbidden games that I play

Though it's forbidden in dim quiet places
To capture the rainbows my aching heart chases
My bittersweet ecstasies come to me here
In these forbidden games that I play

Everyone knows you belong to another
Spinning your magic for her and no other
Still, I've been content to be part of this fantasy
Part of this game that I play

Though it's forbidden and you'll love me never
I'll keep my love hidden and love you forever
Through countless eternities, you will be mine
In these forbidden games that I play



(Algo así como... )

Aunque mis brazos tienen prohibido abrazarte,
a pesar de todo, mis lágrimas te habrán dicho
que te abrazo en secreto cada vez que nos encontramos
en estos juegos prohibidos a los que juego.

Aunque está prohibido en sitios tranquilos y oscuros
capturar los arco iris que mi corazón dolorido persigue,
mis éxtasis agridulces me invaden aquí,
en estos juegos prohibidos a los que juego.

Todos sabemos que perteneces a otra persona,
tejiendo tu magia para ella y para nadie más.
Con todo, he sido feliz por formar parte de esta ficción,
parte de este juego al que juego.

Aunque esté prohibido y tú no me vayas a querer nunca,
yo mantendré mi amor escondido y te querré siempre.
Tú serás mío por los siglos de los siglos
en estos juegos prohibidos a los que juego.

miércoles, 12 de noviembre de 2008

¡Miénteme bien!




Ante esta canción de mi admirada Concha Buika me quedo sin palabras. Sólo sé que las canciones tristes me hacen llorar.

domingo, 9 de noviembre de 2008

Mi bonsai, mi bosque








Hace poco me regalaron un bonsai, ese pequeño arbolito manipulado, tan común en Japón. Me preocupaba no poder cuidarlo, sobre todo porque se tardaba en acoplarse al ambiente de su nueva casa. Al principio perdía sus hojitas, pero de repente se ha dedicado a regalarme florecillas blancas todas las noches. Y más que eso, me regala alegrías. Efímeras sus flores, pero permanentes los recuerdos. Un regalo sutil, un ser vivo de 12 años que hay que cuidar. Me alegra verlo en mi ventana, donde parece estar añorando el bosque. Y me alegra que me recuerde la presencia en mi corazón quien me lo regaló con tanto cariño.

miércoles, 5 de noviembre de 2008

Ganó el Negro!


¡Y ganó Barack Obama, un negro! ¡En los Estados Unidos de América! ¡Un Presidente "de color"! Como para que digan que los gringos son racistas...

Ahora habrá que esperar a ver cómo dirige los destinos de "la nación más poderosa de la tierra" este descendiente de inmigrantes africanos. ¿Será capaz de hacer realidad el sueño americano? ¿De disminuir la prepotencia de su país y de sus dirigentes? ¿De terminar las guerras por el petróleo? ¿De acabar con la pena de muerte? ¿De dar igualdades a todos, todos, todos?

martes, 28 de octubre de 2008

Un regalo de otoño

Conozco a una mujer de mediana edad, a la que habitualmente le sirvo un vino blanco en copa helada, con la que suelo intercambiar comentarios sin mayor importancia. Últimamente ha faltado a sus citas con la barra del bar y cuando la vi cruzar por la calle salí corriendo a saludarla y a preguntarle cómo estaba. Se había "retirado" a hacerse unos análisis médicos y a escaparse de los chismes de barrio de sus vecinas. Hemos conectado bien. Comparte conmigo sus ideas y algunas decisiones, como la de tomarse unas "semanas sabáticas". De ahí que me contara como disfruta aquello de "no hacer nada" o, mejor, hacer lo que se le ocurra. Me contó también que disfruta irse al parque y escuchar el rumor de las hojas secas arrastradas por el viento sobre el suelo arenoso de los caminos. Y me encantó cómo me lo contaba, con sonidos muy suyos acompañados con el fino movimiento de su manos de uñas pintadas y pulseras de diseño.

Pero lo mejor, lo que me emocionó profundamente fue su regalo del día siguiente. Me traía en una bolsa de plástico dos hojas que recogió para mí, para que recordara su suave movimiento en otoño. Para que evocara el sonido del viento en los árboles y el murmullo del agua en las fuentes públicas y en los ríos.

Ello habla de una mujer sensible, dulce. De quien sabe del valor de las cosas simples. Las que no se compran. Se tienen o no se tienen. Como su sensibilidad.

Mil gracias por tan entrañable detalle, Trini.

lunes, 27 de octubre de 2008

Navidad desde el Otoño



Faltan casi dos meses para Navidad. Estamos en otoño. Y desde la semana pasada me encontré con que estaban instalando estos pasacalles luminosos navideños. ¡Qué agobio! Parece que es una idea del alcalde de Zaragoza, para levantar un poco los ánimos en esta "época de crisis". Antes se decía que "La Navidad comienza en El Corte Inglés", por aquello de la promoción publicitaria para las compras de fin de año. Ahora lo mandan otros. Pero no soporto ver Papás Noel, árboles de Navidad, imágenes de copos de nieve y distintos adornos propios de esa época desde mediados de octubre, cuando aun no se han caído las hojas de los árboles. Cada vez intentan manipularnos más, enredarnos más, ilusionarnos más... tratando de ocultar el sol con un dedo. Cuando todo es más simple... como la Navidad real.

domingo, 26 de octubre de 2008

domingo, 19 de octubre de 2008

Frasecitas

El amor es delicioso, pero la delicia aumenta si se lo reiteran a uno con palabras bien reiterativas.
Alexandra Uribe.
Amor de Domingo


¡Te amo mucho
y te quiero copiosamente!


"Bendita sea la gente tocada por el amor"
Fito Páez


"El Amor es un don;
el Odio, una falta de talento".
Antonia, en "Hombres"
original de Mónica Agudelo)

sábado, 18 de octubre de 2008

Me gustó

Por allá en los albores del año 2000 inicié una aventura con este loco corazón. Me enamoré. Me entregué. Di todo. Y fui muy feliz, mientras duró. Revolviendo viejos papeles me encontré algunos que no tiré ni quemé después de la dolorosa ruptura. Uno de ellos es este intento de versos (malos por supuesto, pero intensos de sentimiento). Que sirvan hoy para terminar un exorcismo a los malos recuerdos.


¡Me gustó!


Tu declaración en el océano,
las caricias de tus manos,
cada uno de tus abrazos,
tus miradas y sonrisas,
tu timidez pública
y el no tener reservas en privado;


Cada beso simple
y todos los profundos,
el te quiero con palabras
y los te amo de tu cuerpo,
tu deseo explícito
y tus caricias a escondidas;


Contar estrellas fugaces,
ver juntos un eclipse de luna,
secarte las lágrimas,
sentir tu corazón emocionado
y descubrir como hueles...

¡Me gustó!

¿Es posible que no te ame?
Foto de Olivier Rieu

viernes, 17 de octubre de 2008

Inshallah

¿Quién soy?... Papeles que llevan mi nombre... y que, en cierto sentido, reflejan la historia de esta ciudad: pasado feliz, presente desesperado, futuro muy incierto... Pero tu curiosidad por mí se ha agotado... y eso me autoriza a resumir mi retrato en una observación: Yo soy Beirut. Soy una derrotada que se niega a rendirse, soy un gallo enloquecido que canta a horas equivocadas, un perro vagabundo que ladra en la noche. No me avergüenzo de ello. Hay tanta infelicidad en los quiquiriquíes de esos gallos, hay tanta vitalidad en los ladridos de esos perros, y créelo: no ladran solo para descuartizarse, para conquistar la acera llena de basura. A veces ladran para conseguir un compañero al que amar y por el que ser amados, y si lo logran se convierten en los perros más mansos del mundo. En cambio si no lo logran y se ven rechazados, vuelven a su cubil y en él se quedan. Si no se quedan en él, es para volver atrás un instante: dirigir a quien no los ha querido un meneo de cola en señal de suave reproche. En efecto se dan cuenta perfectamente de que
la necesidad de amar es una necesidad que hay que satisfacer en pareja pero que su cantidad o calidad casi nunca está equilibrada, en los dos, por simetría y sincronismo: cuando está disponible él, no está disponible ella; cuando está disponible ella, no está disponible él... O bien están disponibles los dos pero para satisfacer la necesidad de él basta con un sorbo, para satisfacer la necesidad de ella no basta un río, y viceversa. En mi opinión el anatema que Dios lanzó contra Adán y Eva al expulsarlos del Paraíso Terrenal no fue tú-parirás-con-dolor, tú-te-ganarás-el-pan-con-el-sudor-de-tu-frente. Fue: cuando-él-te-quiera, tú-no-le-querrás; cuando-ella-te-quiera, tú-no-la-querrás.

(...)

Del mismo modo que no puede amar a un muerto eternamente, no se puede amar eternamente a quien no nos ama.

Oriana Fallaci

martes, 14 de octubre de 2008

Por una nueva ética del Amor

Por Isabel Peláez, Reportera de El País

"El amor fiesta es una utopía que se construye cada mañana, cada atardecer, cada noche, cuando siento la posibilidad de acercarme al otro o a la otra sin posesión".

Llegar a vivir esa clase de amor, nada posesivo ni asfixiante, es la nueva propuesta de la socióloga francesa Florance Thomas, presentada en Cali (Colombia), en 2002, a una multitud de hombres y mujeres: las seis premisas de una nueva ética del amor. Quienes aún creen que amar es asfixiar al otro con posesivas y engañosas promesas como "tú eres yo y yo soy tú" y "te amaré toda la vida" o con patriarcales elogios que no son tal: "me gustas cuando callas" (Neruda), tendrán la posibilidad de salirse del paradigma o por lo menos estudiar los nuevos adverbios del amor y conjugar otros verbos como madurar, tolerar y liberar...


Necesitamos...


El amor, la locura más curativa y civilizadora del mundo, siempre y cuando aprendamos a amar sin promesas, sin juramentos de felicidad eterna, sin engaños. Con el augurio de amar al otro o a la otra libre, sabiendo que no por esto evitaremos el dolor, pero siempre seremos en el amor.

Menos cópula, genitalidad e instinto y más lenguaje, erotismo y escucha del otro u otra.

Menos afán, más calma.

Menos consumo y más satisfacción del otro y de la otra.

Menos verdad absoluta, menos adverbios de un amor totalizante, como el asfixiante: 'yo soy tú y tú eres yo'.

Dejar de pedir al otro que nos ame para siempre.

Menos símbolos de un amor totalizante, del machismo, de la ignorancia y una opción madura desde la tolerancia.

Menos madres desde la confraternidad y más mujeres protagonistas modernas de sus existencias y dueñas de sus cuerpos.

Menos hombres producto de una ideología trasnochada de la virilidad, más paternalización y discursos masculinos de una vida cotidiana. Más compromisos decididos de los hombres para cambiar el poder por una caricia, una fragilidad.

Preguntarnos por una posibilidad de reconstruir los viejos pactos del amor, que se habían construido sobre cimientos de poder que imposibilitan todo diálogo y convivencia.

No hay un otro u otra para mí

El amor de los boleros, de las baladas y de los vallenatos, que extraen sus contenidos de nuestros imaginarios amorosos son simples metáforas que nos ayudan a soportar la realidad que es otra, aun a cuento del enamoramiento, la primera fase del amor.


Ilusiones muy arcaicas toman la delantera y abren la puerta al deseo de colmar el vacío, de calmar ese deseo de fusión y perderse en el otro.

El enamoramiento es la trampa fantástica: "por fin encontré al otro que me va a complementar, me colma de todo, yo soy tú y tú eres yo, amor mío". "Veo el mundo con tus ojos".

Una mañana ese yo se estrella contra una pared y mientras más se haya creído tales promesas, más duro o más apegado esté a esa etapa, más fuerte va a ser el golpe.

Derecho a la indiferencia

El amor es complejo y diverso, heterosexual y homosexual, explica Florance Thomas.

Repensar el amor es ampliar sus fronteras y abrirlas a otros encuentros que permitan que dos hombres o dos mujeres puedan vivir el deseo amoroso, desde el legítimo deseo a la diferencia, para luego exigir el derecho a la indiferencia.


En Colombia apenas se está buscando el derecho a la diferencia. En los países europeos la consigna es el derecho a la indiferencia, es decir que homosexuales y heterosexuales bailen juntos y no obligar a los primeros a vivir en guetos.

Derrumbar las fuentes de la homofobia. Gays y lesbianas nos incitan a cultivar la voluntad de ir más allá y de actuar sobre nuestro futuro, a partir del cual sería posible reintentar nuevas formas de relaciones consigo mismo y con los otros, rechazando modos de vida impuestos y resistiéndose a la liberación sexual obligada.

Hablar de tolerancia y de diferencia se debe hacer desde la tierna edad y en la cotidianidad.

Cómo amar de otra manera

Las formas de amar que subsisten fueron articuladas por el lenguaje, la historia y la cultura. Hoy en día se ha pasado de la cópula y del instinto, al deseo y al amor, se ha convertido el sexo en sexualidad.

El reto no es hacer el sexo, copular, sino hacer dramáticamente el amor con un otro o una otra desconocido e innacesible, aunque se llega a creer tramposamente que ese otro u otra se conoce. Para el amor existe una nueva ética.

Entre el demandar amor y su respuesta hay una distancia, un vacío. Demandar amor es pedir algo que el otro u otra no me puede dar. Es confrontarse con el vacío, con la insatisfacción o con una satisfacción que siempre será parcial.

Madurar en el amor es aceptar esa carencia, entender que no existe un otro o una otra que se acopla perfecto a mis demandas y que gracias a este vacío existe el deseo.

Porque siempre falta amor sigo buscando y así vivo y me vuelvo sujeto de la cultura. Si el otro me colmara entraría en un nirvana y me dejaría morir.

Y el origen del amor que podemos dar se encuentra en el amor recibido, pero recibido bien, no de la sobreprotección.

Cuando uno entiende que no hay un otro para mí uno se vuelve capaz de amar. Ningún otro podrá satisfacer mis demandas y el otro espera de mí lo que no le puedo dar. Entenderlo significará que toleramos que el otro o la otra no va a ser mío(a) y que siempre subsitirá en su diferencia.

El otro subsiste en su diferencia

El otro siempre va a penetrar el límite de mi libertad.

El enamoramiento no supone un paso cerrado, una fusión asfixiante: "respiro por tu boca", "veo el mundo con tus ojos", es un proceso amoroso casi sicótico y paradójicamente solitario, porque finalmente negamos al otro.

Los protagonistas del amor han cambiado, ya no son Efraín y María. Las mujeres están aprendiendo a hablar y desear desde nuevos lugares y el viejo guión amoroso de la eternidad ya no sirve.

A partir del reconocimiento de la diferencia existencial de sujetos libres y autónomos y del aprender a definir "yo soy yo, tú eres tú" se logrará una nueva manera de amar. Reconociendo que "no tengo para ti lo que esperas de mí" y admitiendo así que la soledad es el meollo de la condición humana.

Ellas y ellos

Sólo aprendiendo a enamorarse de la distancia que nos separa hay posibilidad de encuentro. Sólo desde la libertad es posible el amor. Desde su propia palabra del amor y el erotismo las mujeres descubrirán un goce que no se tiene que alimentar del goce masculino.

Mientras no haya mujeres en las mesas de negociación no va a ver nadie que ponga sobre el tapete la vida cotidiana, los problemas domésticos, el amor, el erotismo y esos temas hacen parte de la paz.

La masculinidad no es una esencia, es una ideología, una construcción. Hay que desterrar sueños de hombre como: "La amo a usted dependiente, luego adorable", "Me gustas cuando callas...".

Abandonando los privilegios que les otorgó una cultura patriarcal, dejando de ser amos del saber del mundo, del saber sobre las mujeres y dejando de ser dueños de sus existencias los hombres podrán encontrarse, sin vacilaciones y ambivalencias, con ellos mismos y luego con las mujeres.

lunes, 13 de octubre de 2008

Un hombre ideal: Miguel Bosé


Hace un tiempo, la socióloga francesa afincada en Colombia, hablaba de Miguel Bosé en el diario El Tiempo de Bogotá. Hablaba de Bosé como un hombre ideal. Yo no sé si lo será. Le he visto personalmente dos veces (una en una entrevista que le hice para El Colombiano y otra anoche en un concierto en Zaragoza), le he escuchado muchas y me ha gustado siempre.

Ayer, en un Paseo de la Independencia abarrotado de gente, en el cierre de las Fiestas del Pilar en Zaragoza, vi cientos de contrastes. Personas de mediana edad que nos llenábamos de nostalgia con Amante Bandido, Linda, Amiga, Don Diablo o Sevilla; gente más joven que también se sabe sus canciones, una mujer en su privilegiada ventana saltando como loca aplaudiendo y cantando a su ídolo. Pensé un comentario que me han hecho: "Cuántas personas y cuántas historias hay en este sitio". Sí. Cada uno con sus amores y desamores, a cada uno le llega una canción u otra. Cada uno recuerda, revive, llora y olvida.

Y volviendo al comentario de Florence Thomas:

"Confieso que existe un amante bandido con el cual me gustaría pasar una noche, ese es Miguel Bosé. Me cambiaría de los estériles amantes que he podido conocer (algunos, no todos), machos engreídos que creen sabérselas todas. Me reconciliaría del todo con esta nueva masculinidad que apenas se está esbozando.

Por un hombre así, sería capaz de volver a creer en el amor, en un amor posible; sería capaz de volver a conocer noches en blanco y días de desorden. Sería capaz de recrear un amor "que no haga más preguntas, preparado a no entender, que mire bien de frente, suficientemente fuerte; amor que no busque salida y no me cueste la vida".

Bello, Miguel Bosé no confiesa nunca que lo es y sin embargo nos lo dice todo el tiempo. Pacifista, andrógino, herido, vulnerable y sabio.

Hombres tiernos, hombres frágiles, hombres reconciliados con su feminidad, hombres cobardes como los llamaba una heroína de Gabo; es decir, hombres presentes y decididos a renegociar la vida cotidiana: hombres capaces de bañar a un recién nacido, hombres que se inventan cuentos de lobos buenos y princesas estúpidas para sus hijas, hombres que lloran en público, hombres dialogantes, hombres humildes y asombrados por el misterio de la sexualidad femenina, dispuestos a dejar de ser amos del saber sobre el mundo, el saber sobre las mujeres; hombres de imaginación lúdica que permita posponer el tiempo; hombres sin afanes, dispuestos contemplar más que consumir a la otra, al otro; hombres amantes, bandidos, irreverentes con el erotismo, creativos en los momentos de penuria eréctil cuando por fin sus manos, su lengua -que es saber y palabra, pero también sabor- recorrerá nuestra geografía femenina; hombres bisexuales, hombres tiernos con hombres, hombres que también aman a hombres".

domingo, 5 de octubre de 2008

Lágrimas Azules

Ojos azules no llorés
no llorés ni te enamorés
Llorarás cuando me vaya
cuando remedio no haya.


(de una canción popular latinoamericana)
Ojos Azules se ha enamorado. Hasta los huesos. De unos Ojos Moros. Estuvo buscando, errando, vagando por las noches hasta que se encontraron. Y he visto rodar por sus mejillas inmensas y bellas lágrimas azules porque los ojos morenos que ama se han ido por un tiempo, como para jugarle una trampa pesada a la nostalgia.
Yo me enamoré, antes, hace tiempo, de esos Ojos Azules que hoy no sé consolar. Dice que le miro con compasión. No sé si es la definición exacta. No quiero que esos Ojos que tantas veces me miré en ellos estén tristes. Porque no quiero que su corazón vulnerable esté como ahora, como un niño atemorizado en una noche de tormenta, con miedos que para quien los siente son inmensos para quien le quiere pueden evaporarse con un abrazo y unas cuantas palabras amorosas dichas en voz baja.
Daría lo que fuera por verle reir, porque no tenga miedo. Quisiera decirle que el Amor duele a veces pero que es lo mejor que existe en el ser humano. Que el tiempo lo cura todo. Que Ojos Moros volverá, como le ha prometido. Que será feliz (aunque no sea a mi lado). Que no quiero que moje las calles con sus lágrimas azules. Que recupere las estrellitas que brillan entre sus pestañas. Que le quiero tanto que yo también he mojado la almohada llorando por sus pesares. Que merece liberarse de sus miedos, soltarse, sentir, vivir, encontrar ese sentido que siempre ha buscado para su existencia y que tiene oculto tras armaduras fuertemente soldadas.
Este tiempo pasará, Ojos Azules. Y yo seguiré a tu lado, en la corta distancia, para estar al alcance de tu mano para escucharte, para apoyarte, para celebrar tu andar por la vida con sus alegrías y sus pesares. Y para no dejarte caer.


¿Todo esto por qué? Porque cuando estabas a mi lado, me hiciste muy feliz. Y porque te quiero mucho, mucho, mucho.